Este 2016 es un año bisiesto, es decir el mes de febrero tuvo 29 días, esto ocurre cada cuatro años. Esta alteración en nuestro calendario tiene que ver con la rotación de la Tierra.
Un año bisiesto dura 366 días, porque la Tierra tarda aproximadamente 365 días con 6 horas en girar alrededor del Sol, por lo tanto cada cuatro años existen 24,24 horas que sobran.
Para resolver este desfase, en el año 46 antes de Cristo, Julio César aprobó el calendario juliano, considerando años bisiestos aquellos divisibles entre cuatro. Más tarde, durante el papado de Gregorio XIII, el calendario juliano fue sustituido por el calendario gregoriano, que incluye años bisiestos cada cuatro años, según un ciclo de 400 años.
Esta situación provoca que las personas que nacen o se casan en un 29 de febrero no tengan un día en que celebrar su cumpleaños o aniversario de bodas, durante los próximo tres años. El próximo año bisiesto será en 2020.
Pese a ello, ayer el Registro Civil e Identificación celebró ayer a nivel regional una serie de matrimonios, dos de ellos en la ciudad de Coquimbo, mientras que en La Serena se llevaron a cabo dos Acuerdos de Unión Civil (AUC). El director regional de la entidad Oscar Kock indicó a LA REGIÓN que los servicios funcionó de manera normal este 29 de febrero.
«Para efectos de esta dos ceremonias, el matrimonio y el Acuerdo de Unión Civil quedan a criterio de las personas cuando lo celebran. En estos casos los oficiales civiles son los que proponen ciertas fechas a los contrayentes y son ellos que lo que deciden si aceptan o no», afirmó.
En el caso de los recién nacidos, el director del Registro Civil fue claro en señalar que la inscripción tiene que coincidir con el comprobante de parto emitido por el centro hospitalario. «Tienen que ser coincidentes ambos documentos, por lo que los niños tienen que ser inscritos el día que corresponde, en este caso el día 29 de febrero», dijo Kock.
En el caso del Hospital de La Serena, ayer se produjeron tres nacimientos, mientras que el Hospital San Pablo de Coquimbo esa cifra llegó a cinco. En el caso de la Clínica Elqui de La Serena, se registraron tres nacimiento, todos ellos programados.