El Intendente regional Claudio Ibáñez, junto a la directora del hospital doctora Eugenia Ortiz, el director del Servicio de Salud regional Ernesto Jorquera, acompañados del Seremi de Salud Rosendo Yáñez y el gerente de la empresa a cargo de las faenas de demolición, Mario Porzio, informaron sobre los detalles y cronograma del proyecto que implica la remoción del edificio de cuatro pisos y de 15 mil metros cuadrados en 90 días.
Ibáñez, indicó que la demolición da respuesta a la necesidad de contar con un recinto adecuado para la atención de los pacientes y usuarios de la tercera y cuarta región, en vista que la antigua torre, que sufrió graves desperfectos a raíz del terremoto de Punitaqui y del terremoto y tsunami del 16 de septiembre del año pasado
«Una de las infraestructuras más dañadas tras el 16S, fue la antigua torre de este hospital que ya había sido afectado por el terremoto de Punitaqui de 1997, sin embargo ahora esta estructura quedo con daños mayores que obligaron a realizar medidas de mitigación y luego de unos días post terremoto y tsunami, logramos instalar el hospital modular del Ejército que desarrollo más de 2.422 atenciones lo que permitió disminuir la lista de espera tras la emergencia, pero la apuesta mayor era demoler esta torre».
La autoridad añadió que tras la demolición, será construido un edifico modular cuyo costo es cercano a los 3.600 millones de pesos, el que prestará servicios en distintas especialidades ambulatorias, «dentro del plan de mitigación viene la recuperación de camas que no han sido recuperadas hasta la fecha, lo que implica la construcción acelerada de un hospital modular que va tener cerca de 50 nuevas camas las que incluso va a superar el déficit actual. Sin embargo, la apuesta es mayor porque queremos avanzar hacia la normalización del hospital, que es parte de nuestra estrategia, proceso que demanda unos cuatro años en que hay que partir con los estudios. Ahora se ha podido reasignar cerca de 270 a 280 camas que están operativas y el déficit es de, más menos, 39 camas, y para eso, necesitamos volver al normalidad con este hospital modular».
El director del Servicio de Salud, Ernesto Jorquera, informó para lograr contar con el hospital modular, hubo una planificación que apunta a reponer la infraestructura dañada y los servicios del principal recinto médico local. «Trabajamos en tres grandes líneas, la primera fue enfrentar la contingencia lo que tenía que ver con la llegada de hospital de campaña del Ejército que funcionó por cinco meses y la recuperación de algunas áreas como la unidad de siquiatría y paciente crítico.
La segunda tuvo que ver con, en primer término, estudiar que iba a pasar con esta torre y la posibilidad de recuperar la unidad de cirugía menor ambulatoria y recuperar camas, en que vamos a tener un déficit por un año más a lo menos, y así, hemos cumplido con ambas fases. Viene esta nueva fase de demolición y construcción del recinto modular, sin dejar de trabajar la fase final de normalización de este hospital».
En cuanto al funcionamiento del resto del complejo hospitalario durante la demolición , la directora Ortíz, puntualizó, «en el hospital modular a futuro, va estar el servicio de siquiatría y allí se va instalar el policlínico, pero actualmente hemos recuperado lo que fue deteriorado por el terremoto. Los pabellones quirúrgicos están funcionando con doble turno y ahora estamos recuperando la unidad de cirugía mayor y endoscopia. La unidad de paciente crítico fue trasladada a un piso de la torre nueva».
Mario Porzio, junto a los ingenieros de la empresa que encabeza, planificó un sistema de demolición de la estructura que será realizada con modernas maquinarias, a cargo de unos 12 operarios, que cuentan con martillos neumáticos de gran tamaño y «pinzas» que cortan acero y hormigón, trabajos que incluyen aspersión constante de agua, para evitar la contaminación por partículas de polvo y residuos.
«Estamos muy cercanos a la zona nueva del hospital y se optó por una demolición ecológica que funciona con cortes de hormigón por separado, disminuyendo prácticamente a cero el polvo en suspensión y el ruido y hemos presentado un plan de faenas a las autoridades con todas las medidas de mitigación, con recubrimiento de la estructura demoler con mallas y abanicos de seguridad».
Porzio, comunicó además que ser construido un túnel para el paso de personas hacia la zonas que no serán intervenidas, «también presentamos un by pass para conectar la torre nueva con el resto de las dependencias que van seguir funcionando el que será visto por al Servicio de Salud, en los próximos días pero obtuvimos una buen aceptación y el by pass, va a rodear la zona a demoler y una vez que funciones el by pass, recién empezaríamos a demoler, tras la realización de la desrratización y obtener los permisos de demolición, de los tres blocks en un plazo de 90 días».
soy antonia valenzuela de la ciudad de coquimbo, tengo 12 años y he visto la gran obra que esta haciendo el municipio de por aquí, encuentro que es una gran obra y se beneficiaran muchas personas de por aquí al ser afectados por el terremoto hoy tendrán nuevas oportunidades de salud y mas espacio entre otras…
espero que leas este mensaje porque es la verdad soy antonia, y esta es mi oopinion.
( se que soy chica parea meterme en estas cosas pero me gustan las noticias he informarme pero tengo un gran vocabulario, soy buena estudiante y es mi derecho, gracias y buen periodico..)