Con el voto a favor de Guido Hernández (que en una primera instancia había rechazado la propuesta de la administración Manouchehri), el Concejo Municipal de Coquimbo aprobó en sesión extraordinaria el presupuesto municipal de más $ 68 mil millones para el año presupuestario 2022. Cita que se dio de manera especial por una petición efectuada por un grupo de concejales, quienes emplazaron al alcalde en una acalorada reunión online.
Las dudas emergieron de parte de concejales como Camilo Ruiz (PC), Felipe Velásquez (Independiente), Nelson Martínez (PC) e Ignacio Plaza (Frente Amplio), quienes pidieron debatir sobre los futuros recursos con el alcalde.
«No se ven líneas ligadas al ahorro que tanto nos ha hablado usted señor alcalde. Uno se pregunta si será necesario gastar esa plata. Se proyectan contratos con la empresa de basura, que sabemos no ha dado el ancho con el retiro de residuos, y además las platas del Casino, que aún no sabemos si llegarán finalmente», dijo Velásquez.
Lo doctora Elgueda hizo lo propio con el presupuesto de salud. «No queda claro, no alcanzan los dineros para el área de salud. Estamos en medio de una pandemia y no vemos prioridad para esta área. No se inyectarán recursos en medicamentos. No se sabe en qué se van a invertir los dineros ahorrados o qué modificaciones van incorporar a la propuesta suya señor alcalde».
El edil, acorralado, respondía que todas esas observaciones no se hicieron de manera formal (escrita) y solo apuntarían a indicaciones verbales que efectuaron algunos miembros del concejo.
En ese contexto se llevó la votación. A favor: Pablo Galleguillos, Mario Burlé, Freddy Bonilla, Abraham Schannaiderman y el propio Alí Manouchehri. En contra: Rosa Elgueda, Camilo Ruiz, Felipe Velásquez, Nelson Martínez y Guido Hernández.
Sin embargo la votación tuvo que repetirse, debido a que un concejal (Ignacio Plaza) no pudo votar por problemas de internet. Así, al repetirse el proceso, el concejal Hernández cambió su voto a favor del presupuesto, acaparando críticas de sus pares, quienes lo apuntaron de darse «vuelta la chaqueta».
«Quise destrabar una situación que se asomaba como compleja. Con mucho pesar, porque yo también soy critico de esta gestión. Lo cierto es que lo hice para dar un voto de confianza a la administración del alcalde Manouchehri, para que salgamos juntos de esta crisis que está golpeando duro a nuestro vecinos», se defendió Hernández.
«Hoy tenemos un trabajo arduo, serio, responsable y profesional, donde también me siento orgulloso de los funcionarios, porque tienen, tuvieron y han tenido la oportunidad de desarrollar un presupuesto en base a la seriedad, compromiso y profesionalismo; un trabajo arduo que ha sido presentado a ustedes», señaló el alcalde Alí Manouchehri.
Entre los aspectos del presupuesto se considera la reducción de gastos en el arriendo de inmuebles, pues al entregarse el nuevo edificio consistorial el ahorro será de $ 150 millones. Para el año 2022 se considera una menor flota vehicular, que significará un ahorro a las arcas municipales de $ 308 millones.
Lo mismo ocurrirá con la reducción de 900 a 600 millones de pesos del presupuesto para la tradicional Pampilla de Coquimbo, «buscando ajustarnos a la realidad financiera del municipio actualmente, pero que gracias al funcionamiento de la comisión Pampilla se trabajará con la debida antelación, y entregar una fiesta coquimbana acorde a las circunstancias», expresó el jefe comunal.
En tanto, y en el ámbito de Salud, «en estos 4 o 5 meses que llevamos de administración se han transferido más recursos de lo que se hizo en 2018 y 2020, eso habla por sí solo respecto de lo que tiene relación con este plan de austeridad», agregó el edil Manouchehri.
La votación del Presupuesto Municipal 2022 se realiza a días que finalice el plazo para la aprobación de este instrumento, que se extiende hasta el 15 de diciembre.
