Cuando parecía estar todo listo hace algunas semanas para desalojar a los ilegales que se habían instalado en La Recova, todo se dilató por «falta de comunicación», y lo que era sólo una cuadra con vendedores de verduras, hoy es una manzana completa con comerciantes que se niegan a volver al Mercado Central. Finalmente, municipio y Gobierno se han vuelto a poner de acuerdo, pero deben planear una nueva estrategia, ya que claramente ha cambiado el escenario.
De idas y vueltas ha sido la teleserie de los comerciantes ambulantes en el centro de La Serena. Cuando se pensaba que estaba todo listo hace algunas semanas para desalojar a los ilegales, todo se dilató y nadie supo muy bien la razón, pero en el intertanto, lo que era una cuadra, fundamentalmente con vendedores de verdura, se trasformó en una manzana completa con comercio de todo tipo, el cual hoy colma todo el perímetro de La Recova, lo que hace mucho más difícil retirarlos del lugar.
Idas y vueltas
Fue en una reunión entre el Delegado Presidencial Galo Luna, el alcalde de La Serena, Roberto Jacob, Carabineros, Seguridad ciudadana y Seguridad Pública, donde se planeó la estrategia para sacar a los ambulantes que retornaron a la calle luego de que se les hiciera entrega de un recinto para que pudieran funcionar, el denominado Mercado Central, que fue inaugurado con bombos y platillos.
Pero poco duraron allí los vendedores, ya que adujeron que la gente no iba al lugar por lo alejados que estaban y debido a la inseguridad que existe en el sector. Se les pidió que volvieran, pero ante la negativa, las autoridades tuvieron que elaborar este plan de desalojo.
Todos estaban alertas, ya que en cualquier momento tanto municipales como Carabineros procederían, pero nada de esto ocurrió. Claro, desde las dirigencias de los locatarios del mercado central, convenientemente, pidieron reuniones y reuniones con el municipio de La Serena, para ver si se llegaba a algún acuerdo, incluso solicitaron un encuentro con el delegado.
No se sabe si estas reuniones influyeron en algo, el asunto es que el desalojo no se efectuó y los comerciantes continuaron -y continúan en la calle-. Pese a que el presidente de los locatarios, Francisco Contreras, ha expresado que su intención, y la de muchos, sería retornar al mercado, en la práctica, porque incluso ese mismo dirigente ha sido visto vendiendo en La Recova.
«No nos alcanza»
Consultados los ambulantes, reconocen que deberían estar en el mercado, pero acusan que no se les han cumplido todas las promesas que les hicieron cuando el recinto se inauguró, como un acompañamiento permanente, publicidad, la posibilidad de salir a bulevares, y capacitaciones, por lo que haber abandonado el mercado también fue «una especie de protesta» por ello. Sin embargo, admiten que la razón fundamental es que con lo que ganan en el mercado central ni siquiera les alcanza para pagar el arriendo de los puestos, y ante esa realidad no les quedaba otra.
Hubo molestia tanto en el Gobierno como en el municipio por la no concreción del desalojo antes que se produjera el colapso que hay ahora. Faltó comunicación, según fuentes de Diario La Región, en el municipio estaban esperando que el gobierno actuara y en el Gobierno estaban esperando que el municipio diera el vamos, pero no pasó ni lo uno ni lo otro, por lo que desde la delegación se pensó incluso que en la casa edilicia habían cambiado la decisión y echado pie atrás, algo que fue rápidamente desmentido por el alcalde Jacob, quien, a través de un comunicado de prensa, señaló, incluso en un tono acusatorio, que había solicitado tres reuniones con el delegado y que no había sido recibido, pero claro, al parecer esas misivas no fueron recibidas por Galo Luna, y por lo demás, en el gobierno no estaban esperando otra reunión, sino la orden o la instrucción del municipio para actuar con la fuerza pública, ya que entendieron que no era necesario otro encuentro después de lo acordado.
Humo blanco
Pero salió humo blanco. Las caras largas, ya no son tan largas y el acercamiento entre municipio y gobierno para erradicar a los ambulantes volvió a generarse. Aunque ahora sí todos coinciden en que es necesaria una nueva reunión, ya que la estrategia que utilizarían en primera instancia es inaplicable con tantos vendedores. Por lo pronto no hay fecha definida para este desalojo, ya que deben elaborar un nuevo plan. Para ello, esta semana se efectuará un encuentro entre delegado, alcalde, policía, seremi de Economía y locatarios, para fijar nuevas fórmulas y métodos que permitan recuperar el orden obtenido tras la entrega de los recintos del mercado central, pero si algo es seguro, es que en cualquier minuto La Recova será intervenida.