La querella presentada en el Tribunal por uno de los hermanos de la fallecida, un médico radicado en Copiapó, corresponde al ilícito de sustracción de menor, contando con patrocinio del abogado querellante Jorge Alvarado.
De acuerdo a la quereIla los padres de la bebe, Silvia Muñoz y Eliecer Maluenda Maluenda, desde la fecha en que la sepultaron, tienen serias dudas respecto a su identidad, ya que les fue entregada por Carabineros sin mayor certeza de que fehacientemente era su hija., manteniendo esa duda por mas de cuatro décadas.
El texto legal indica que Silvia Muñoz, concurrió en octubre de 1973, al hospital Antonio Tirado Lanas, para efectuar el control de sanidad de la niña, pero una doctora que conocía la situación de su familia en esa fecha ya que su primo Gabriel Vergara, había sido fusilado, mientras que su marido Eliecer Maluenda, estaba apresado en La Serena, le sugirió dejarla internada en observación.
Muñoz accedió a la sugerencia, para ir a visitar a su marido a la cárcel de la capital regional.
Sin embargo, a su regreso, la madre de la menor, al llegar al nosocomio, le fue prohibido el ingreso, pero en base a su insistencia logró entrar tomando conocimiento del deceso de su bebé por una doctora cuyo nombre ignora, quien le dijo textualmente «mataron a tu hija», en tono de grito, motivo por el cual tuvieron que esconderse en un box para evitar exponerse a una detención que podía poner en riesgo sus vidas.
Luego el personal de guardia de Carabineros del recinto hospitalario le entrega el cuerpo de una lactante, sin mayor explicación, ordenándole sin mayores razones legales, enterrarla de forma inmediata en el cementerio con la excusa que era hija de un acusado de subversión.
De las causas de muerte, según el texto de la querella, esta fue provocada según el certificado de defunción, por un shock hipovolémico que corresponde a una pérdida importante de sangre y líquido que hace que el corazón sea incapaz de bombear suficiente sangre al cuerpo, provocando que muchos órganos dejen de funcionar.
Pero ese diagnóstico a juicio de la parte querellante, es contradictorio porque la niña previo a ser hospitalizada presentaría un estado de salud normal, sumado a que debido a que en esa fecha no estaban las condiciones normales de un Estado de Derecho, no hay una precisión total respecto a la identificación de su cuerpo debido a la forma en que fue ordenado su inmediato sepelio.
Es si que la exhumación busca despejar estas dudas, mediante la realización de pericias tanatológicas a los restos de la lactante por lo que el proceso continuarán, con otras diligencias para esclarecer este delicado caso.