Felipe Rojas, conocido como el «Chala» tiene 28 años y es oriundo de Coquimbo. Patina hace 10 años, ha participado con competencias a nivel nacional, y se define como un viajero, anteriormente relata que viajó por Bolivia, Perú y Ecuador durante 4 meses pero de ciudad en ciudad no lo hacía en patines, «que es la diferencia y la gran hazaña» que lo que está haciendo ahora.
El proyecto se llama Blade Ventures, dos alemanes lo diseñaron por un año y «es algo que nadie ha hecho nunca en el mundo, que es patinar por la ruta Panamericana y de ciudad en ciudad, el proyecto original duraba 6 meses y era recorrer todo Sudamérica, desde Río de Janeiro, bajar por Uruguay, llegar a Buenos Aires en Argentina, pasar la cordillera llegar a Chile, pasar por Bolivia, Perú, Ecuador y terminar en Colombia» cuenta el «Chala».
«A estos chicos los seguía por redes sociales» relata Felipe y «ellos pasaron por Coquimbo, patinaron desde Santiago, pasaron por La Calera, se demoraron 4 días y por una amiga, hablaron conmigo y los alojé por dos noches».
«Cuando ellos pasaron, tomé la decisión de irme pero necesitaba equipo, una carpa ligera, un nuevo saco de dormir, toallas, todo ligero porque el peso aproximado de la mochila son 25 kilogramos, ellos se prepararon por un año yo tenía 3 días, patinaron durante 3 días por el Desierto de Atacama, llegaron a Copiapó a la casa de un amigo mío y en esa ciudad comenzamos a patinar hacia Antofagasta» relata.
En la nortina ciudad visitaron el Observatorio Europeo Espacial (ESO) y también pudieron contemplar las maravillas del desierto.
Después su viaje continuó con destino a Bolivia, en donde estuvieron en el Altiplano principalmente, posteriormente recalaron a Perú en donde visitaron Cuzco y Machu Picchu.
«Mi parte del viaje en patines comenzó en Perú a 200 kilómetros de Lima, en Pisco, de ahí patinamos por tres días hasta llegar a Lima por la Panamericana a un costado del Océano Pacífico, fue un poco cansador física y mentalmente, muchas montañas por subir y muchas por bajar, muy entretenido, fue la primera vez que pude patinar más porque las otras veces patinamos menos, en Chile y Bolivia, fue una experiencia increíble» señaló.
Después de Perú visitaron Ecuador, sobre el viaje Felipe nos cuenta que «lo que se avanza por día son 50 kilómetros en promedio, lo máximo que he hecho han sido como 70 kilómetros en Ecuador, a pleno sol en terreno montañoso con subidas y bajadas, patinamos todo el día desde las 9:00 de la mañana hasta las 18:00 horas con unas cuatro paradas aproximadamente».
Una vez en Ecuador patinaron desde Guayaquil a Montañita, «un lugar muy turístico con playas muy bonitas» relata el «Chala».
«Salíamos desde la casa en pleno centro, tomamos la ruta costera y en tres días llegamos a Montañita, fueron 3 días duros, como 70 kilómetros cada día» confiesa.
El proyecto original se termina en Colombia, «la gracia de esto es promover el patinaje, como deporte que está un poco olivado y que la gente lo conozca, nos ven patinando en la carretera, en los parques, en la ciudad, cuando llegamos a las ciudades hacemos ruta con la gente que hace patín y la gente nos llega a saludar, nos sacan fotos, nos entrevistan».
Bien Felipe, mereces un monumento, esto ,debiera patrocinarse , con capitales privados y estatales , asi como se gastan o se dice que se invierten en proyectos que nadie conoce ni conocera , por que nunca los ejecutaron, y las platas desaparecieron , (como pasa en la muni de Coquimbo )
En vez que ocurra lo mencionado , inyectemos recursos aquí en el patinaje , que espectacular , muy bien Felipe , extraordinario , vale un buen proyecto Regional y nacional , que ejemplo has dado , te felicito,
Que las autoridades aprendan , el deporte es cultura, masifiquemos esta actividad es espectacular , bien bien . miuy biennnnnn FELIPE