Unas 300 educadoras de párvulos y técnicos parvularias de la Fundación Integra –que administra jardines infantiles en sectores de riesgo social- se manifestaron este martes en La Serena en repudio a un polémico decreto, el cual les incrementaría la carga de trabajo.
Se reunieron en la Plaza de Ramas de la capital regional, y marcharon por las principales calles céntricas, abogando por sus derechos, sin que se ocasionaran desordenes.
Las educadoras manifiestan su completo rechazo a la instalación del decreto 115, el cual pretende aumentar la cantidad de niños atendidos por parvularia, de 15 párvulos a 25 por módulo.
Maritza Arancibia, dirigenta nacional del Sindicato nº2, señaló que «con el decreto que nos regíamos antiguamente, una técnico, una tía estaba con 15 niños en sala, ahora el decreto dice que la misma tía tiene que estar con 25. Eso va en desmedro de calidad educativa y también de los niños».
También, manifestó la dirigente, está pendiente un bono que se les congeló a partir de este año, están recibiendo niños con pañales en niveles que no corresponde, y además, hay muchas acusaciones de abuso sexual hacia funcionarias y funcionarios con años de servicio, que para ella es injusto, luego que no se haya podido comprobar algo similar.
La directora del jardín infantil El canelo de la Parte Alta de Coquimbo, Mónica Gutiérrez, además de ser presidenta regional del sindicato nº2, explicó que les afectaría bastante esta sobrecarga de trabajo, ya que además no se piensa invertir en infraestructura para recibir a más niños.
