De acuerdo a información recabada por LA REGIÓN, Carabineros, en el contexto de una fiscalización preventiva en terreno, controlaron una camioneta, en la que uno de sus ocupantes se encontraba fumando un cigarro de marihuana. De ahí en más se descubrió que el vehículo era fiscal y en él iban cinco funcionarios de la unidad de servicios generales del municipio de Ovalle, todos prácticamente «arriba de la pelota».
Inédito, pues desde fuentes policiales esbozan que estos actos son normales cuando salen a fiscalizar, pero de funcionarios de la muni, difícil, no había tocado nunca. El vehículo en cuestión correspondería a una camioneta marca Mitsubishi que presta servicios a la Municipalidad de Ovalle, de hecho, circulaba con logos de la municipalidad en la parte delantera, tenía placa de acrílico.
Pasaban los policías y se dieron cuenta del fuerte olor a yerba en la avenida principal. Hecho ocurrido a eso de las 10:30 horas, en la intersección de Calle Libertad con Victoria, frente a la Plaza, donde se toparon de frentón con los avezados trabajadores. Para que usted se oriente, si no conoce la Perla de Limarí, en pleno corazón neurálgico.
Era horario de trabajo, lo que hizo mucho más dura la sanción. A uno se le revisó un banano, en el cual transportaba un envoltorio de papel blanco y dos bolsas transparentes que contenían marihuana.
PROCESO DICIPLINARIO
Desde la casa edilicia señalaron que iniciarán un proceso disciplinario interno por el caso de funcionarios de La Municipalidad de Ovalle, quienes fueron sorprendidos fumando marihuana.
EL ALCALDE
Consultado, el alcalde Jonathan Acuña no quiso referirse, sin embargo, a través de un comunicado, puntualizaron que desde la Municipalidad condenan los hechos que involucran a cinco funcionarios de distintos grados y con diferentes vínculos contractuales, quienes consumían marihuana en una camioneta arrendada por la institución.
«Hemos iniciado un proceso disciplinario interno para determinar las responsabilidades correspondientes y garantizar el cumplimiento de nuestros principios y normativas institucionales».
CRÍTICAS
El hecho golpea a la administración de Acuña, cuentan fuentes al interior del municipio ovallino. Teniendo en cuenta que «lo más condenable es que haya sido en horario de trabajo, quizás alguien pueda decir que todos tenemos derecho a consumir o no marihuana en la vida privada, pero ellos lo hicieron en horario de trabajo, por lo que es totalmente reprochable».
Los funcionarios habrían pedido perdón por lo sucedido.