El Departamento de gestión ambiental de la municipalidad de Coquimbo, está prestando colaboración con chequeos constantes en mar a fin de prestar asistencia en caso de que ocurra alguna contaminación derivada de las faenas, que comenzaron el miércole pasado, de retiro de combustible y restos oleosos del ex barco factoría Don Humberto varado al norte del puerto local, a cargo de la empresa licitada Resolve Salvage & Fire.
Los trabajos que cuenta con un presupuesto de $370 millones aportados por el Gobierno son realizados por 22 expertos y operarios de Resolve Salvage & Fire, que utilizan maquinaria del sistema Miko Moskito.
El Moskito, es un cabezal que puede adherirse de forma magnética al casco y que cuenta con una sierra que perfora la estructura del barco, aparato que además posee una válvula, que sella el orificio, la que es conectada a un ducto que extrae los hidrocarburos mediante bombas de succión que lleva los residuos a estanques ubicados en otra nave.
Es así que la empresa durante las primeras operaciones logró extraer cerca de 5 mil litros de restos oleosos de la bodega número 1 del encallado navío, que podría contener 14,2 toneladas de aceites y alrededor de 680 toneladas de combustible diesel del tipo «bunker», de alta viscosidad y gran poder calórico.
Juan Carlos Rojas, jefe del Departamento de gestión ambiental municipal, explicó que el retiro prosigue de forma normal y que hasta ayer, los chequeos realizado por la entidad que encabeza dan cuenta de que no han ocurrido ningún derrame de residuos oleosos.
«Todo avanza con normalidad sin nuevas filtraciones y este proyecto es el resultado de la lucha que hizo la municipalidad con nuestro pescadores y la asociación gremial de Coquimbo. Es así que en enero pasado después de nuestra insistencia vino el Ministro de Medioambiente Pablo Badenier, con el que nos reunimos junto al alcalde Cristian Galleguillos y el intendente Claudio Ibáñez, y con otras autoridades, cita en que se confirmó la asignación de recursos para realizar estos trabajos».Rojas,manifestó que ante cualquier inconveniente ya existe un plan de contingencia definido, «la empresa es seria y con mucha experiencia en labores similares pero nosotros como Departamento, junto a los pescadores, estamos súper vigilantes par que no ocurra ningún desastre pero igual se han tomado las obras, incluso algunos de los mismos pescadores hicieron un curso específico para apoyar estas actividades y en el mismo sitio están dispuestas las mangas de contención de derrames»
Por otra parte el jefe del Departamento de gestión ambiental manifestó que si bien la extracción está prevista para finalizar en 21 días, hay un margen para paralizar obras si las condiciones climáticas son adversas.
«Si hay marejadas las faenas se suspenden para evitar cualquier problema por el plazo establecido para terminar es de 21 días, pero en general la comunidad nuestra debe estar tranquila porque las cosas se están haciendo bien las autoridades cumplieron con su palabra entregando recursos para licitar a la mejor empresa para en esta primera etapa, retirar el petróleo y la sustancia oleosa del barco».