Fue el domingo 20 de octubre, cuando en una marcha pacífica, cerca de las seis de la tarde, el ecuatoriano Romario Veloz (26), residente en el país desde hace 20 años, cayó muerto por un disparo ejecutado presuntamente por militares en las cercanías del Mall en La Serena. Eran los primeros días de manifestaciones en el país y en la región desde que comenzara el estallido social.
Por entonces, varias ciudades del país estaban en Estado de Excepción. A la fecha, nada aún se sabe de quién apretó el gatillo. Mientras, la familia para recordarlo levantó un memorial. Con los días ha sido una imagen de culto.
Sin embargo, fue el jueves cuando desconocidos le prendieron fuego y dejaron panfletos firmados por los «Arañas Negras» y el logo de Patria y Libertad, movimiento paramilitar de los años setenta. Las consignas fueron claras: «Esto es sin llorar» y «Los vamos a exterminar».
Una acción que no pasó inadvertida, puesto que el seremi de Gobierno, Ignacio Pinto, sancionó el hecho argumentando que «primero quiero partir por condenar cualquier acto de violencia, venga de donde venga. Porque esta no es una forma válida de expresión en democracia, ya que sólo contribuye a dañar y a dividir en momentos en que la unión y el diálogo deben prevalecer».
Precisó que «desde el Gobierno lamentamos profundamente el ataque y daño que sufrió el memorial que recuerda a Romario Veloz. Este acto es repudiable y da cuenta de que hoy la violencia está causando un daño que puede ser irreparable al cuerpo y alma de nuestra sociedad. Hace algunas semanas, junto a la Intendenta Lucía Pinto, nos reunimos con la madre de Romario para expresarle nuestras condolencias y nuestra disposición absoluta para que se logre aclarar las circunstancias en que se produjo su fallecimiento».
Afirmó el vocero que estos grupos que se adjudican hechos como la destrucción de un memorial no quieren que haya diálogo y buscan la violencia como la única forma de expresarse. Por lo mismo, apuntó a que «hoy necesitamos paz para avanzar en las demandas que los chilenos nos han planteado y que hemos plasmado en la agenda social, en la iniciativa para contar con una nueva Constitución, las medidas para evitar los abusos, la agenda de seguridad y el acuerdo por la paz, la democracia y contra la violencia.
Tenemos un Gobierno que está completamente en acción, y en estos más de 50 días complejos y difíciles hemos podido sacar adelante anuncios muy buenos para la ciudadanía, que no son definitivos, pero son un primer gran paso para que nuestros compatriotas se sientan escuchados».
El diputado Daniel Núñez…
«Me parece que la situación que se genera con la destrucción del monolito de Romario Veloz es de pura intolerancia y negacionismo, pero lo más grave de todo es que son acciones que buscan justificar y legitimar violaciones a los Derechos Humanos en Chile. Son actos que deben ser inmediatamente repudiados y que por ningún motivo pueden aceptarse, y que se exija que se pueda investigar a quien o quienes están detrás de esta situación».
Dijo que lo importante es saber «quiénes están avalando e instigando estos hechos, porque esto provoca que grupos de extrema derecha, de carácter paramilitar, terminen en agresiones, atentando a personas que piensan distinto y que defienden los intereses democráticos».
Sería extremadamente grave, dice, que estos grupos vuelvan, así que espero que sea investigado. Y exijo que rápidamente las autoridades regionales tomen esta situación e investiguen a quiénes están detrás de estas acciones, y si es necesario, por supuesto que voy a ver la posibilidad de interponer acciones legales para lo mismo».