Hace unos días el conocido geógrafo Marcelo Lagos había anunciado que Chile se debía preparar para enfrentar el fenómeno «La Niña» más fuerte de la década, que encrudecería la sequía y aumentaría las precipitaciones en el norte por el «invierno boliviano». El meteorólogo del CEAZA, Luis Muñoz, comenta que existe un 50% de probabilidades que la condición se extienda junio.
El geógrafo Marcelo Lagos, en un canal nacional, había analizado distintos fenómenos naturales que afectan al país, y en esta ocasión se había referido al fenómeno climático de «La Niña», que sería de la forma más fuerte de la década, en sus palabras, lo que se traducirá en escasas precipitaciones.
Lagos había explicado que desde agosto los estudios y distintos sensores han detectado la presencia de «La Niña», el cual en un comienzo no se sabía la magnitud que iba a tener.
Significa que los vientos del pacífico trasladan las aguas cálidas hacia Indonesia y Australia, dejando las costas de Chile con menor temperatura, y por ende, con menos lluvias y también con menos temperaturas máximas.
El meteorólogo del Centro de Estudios de Zonas Áridas (CEAZA), Luis Muñoz, señala que «se espera que La Niña continúe con intensidad moderada durante el trimestre enero, febrero y marzo del 2021, afectando incluso a gran parte del mar chileno, con aguas más frías de lo normal».
Y para los meses posteriores, comenta que «La Niña» irá disminuyendo de intensidad acorde pasen los meses, llegando a ser de intensidad débil durante el trimestre marzo, abril y mayo, «pudiendo ser el último trimestre en que este fenómeno esté presente en el Pacífico. La prolongación de este fenómeno más allá del trimestre de otoño aún está bajo incertidumbre, existe prácticamente un 50% de probabilidades de que La Niña se extienda hasta el trimestre abril, mayo y junio del 2021».
«Misma probabilidad de que aquel trimestre esté bajo una fase Neutra, sin La Niña ni El Niño. Esta incertidumbre se irá resolviendo conforme avance el año» agrega.
La Niña, en general, ha permitido y permitirá que se registren temperaturas máximas y mínimas más bajas de lo normal en la costa y en algunas zonas del interior de la región de Coquimbo.
«Este efecto en las temperaturas también se registrarían durante el trimestre de marzo, abril y mayo, por lo que no se descarta que se observen heladas tempranas» sostiene.
Aunque es pronto para determinarlo, respecto a cómo se proyectan las precipitaciones para otoño e inverno, comenta que «de momento, se espera que La Niña permita que el trimestre del otoño sea más seco de lo normal».