En la actualidad se sabe de los restos de los soldados que están en el mausoleo del cementerio municipal, pero hay cientos de ellos que volvieron a sus pueblos y villorrios quedando en el más completo olvido. El Coronel del Regimiento Coquimbo, Alberto Rivera, señaló que será un «homenaje póstumo».
Nicolás Véliz
Con la idea fija de poder recuperar parte de la historia del Batallón Coquimbo y el recuerdo de los soldados de la región que participaron en la Guerra del Pacífico, un grupo de historiadores, académicos y personal del Ejército está preparando un documento que señale claramente en qué lugar de la Región de Coquimbo están sus restos.
El Coronel del actual Regimiento Coquimbo N°21, ex Regimiento Arica, Alberto Rivera, señaló que esta es una idea que se está trabajando desde hace un tiempo en conjunto con el Batallón simbólico Coquimbo. «Hemos conversado con personal del Regimiento que se encarga de rescatar la historia y también de un grupo de personas del Batallón simbólico Coquimbo y la idea es rescatar, buscar y estudiar dónde están enterrados todos los veteranos de este Batallón Cívico».
Rivera señaló que en la actualidad hay algunos restos de ex combatientes del Batallón cívico Coquimbo que están en el mausoleo de La Serena, pero agregó que «hay muchos que luego de la Guerra del Pacífico volvieron a sus pueblos. Tenemos veteranos sepultados en Andacollo, Vicuña, Paihuano, incluso en cementerios de caseríos aislados. Eso es lo que queremos rescatar, dónde está y en qué situación están. Queremos estudiarlo y poder plasmarlo en un libro para tener un registro de la historia».
El Coronel Rivera manifestó que esto se enmarca en un proceso de recuperación de la memoria de estos soldados, además de lograr la recuperación del monumento que la ciudad de La Serena les levantó frente al actual cementerio municipal y que es constantemente víctima de jóvenes que lo rayan y destruyen.
Sobre la idea que este sea un homenaje póstumo a 133 años del inicio de la Guerra del Pacífico y que vio luchar y caer a cientos de jóvenes, hombres y mujeres, Rivera aseveró que «sí, es un homenaje póstumo. Ese es el plan a mediano plazo. Ya hemos tenido contacto con familiares de los veteranos y ellos están muy interesados y contentos. Porque fueron parte de nuestro Ejército y como tal nos debemos a ellos también».
Yo soy tataranieto de uno de los que estaban sepultados en el mausoleo frente al cementerio de La Serena
Aun no ha claridad en lo concerniente a los restos de nuestros veteranos, mi tatarabuelo, Francisco Castillo Marín es uno de los tantos veteranos olvidados por su patria. Me siento orgulloso de llevar su sangre porque es sinónimo de sacrificio, generosidad y valentía. Es de esperar que el regimiento que hoy acoge las lapidas de nuestros viejos también les de el merecido reconocimiento ante el resto de la ciudadanía.
Atte
Jorge Pizarro Pardo
Profesor de Estado en Historia y geografía
Tataranieto de Veterano GDP