Voceros de la protesta del Liceo Industrial José Tomás de Urmeneta, ubicado en el sector de Guayacán Coquimbo, luego de entrar en paralización el día jueves de la semana pasada por presencia de ratones, pronosticó una semana más sin clases ante el dilema de las plagas.
De mal en peor son algunas situaciones que afectran a liceos públicos del puerto. El lunes 24 de marzo del 2025, después de una reunión que duró tres horas con diez minutos, que compuesta por toda la comunidad educativa, entre docentes, asistentes, apoderados, se determinó continuar la pelea.
Fue durante la semana pasada cuando se supo de los ratones que estarían afectando al recinto.
Lo cierto es que las clases se retomarían recién el día 31 de marzo, debido al acta emitida por la seremi en relación a las condiciones de salubridad y la plaga de roedores que se viene dando hace muchísimo tiempo dentro de las instalaciones del establecimiento educacional.
Sin embargo no todos los apoderados se encuentran conforme con esta situación, debido al prolongado tiempo que se está perdiendo en la educación de sus hijos. Son 288 raciones de almuerzos y desayunos, para los alumnos que se entregan diariamente y no podrán cumplir su función hasta el cese del paro.
Desde parte del personal docente menciona las consecuencias de tan largo paro. «Lamentablemente nos señalan que se nos descontará del sueldo esos seis días que se paralizarán las clases». Abriéndose la polémica de la recuperación de horas con descuento o sin afectar el bolsillo de profesores y asistentes de la educación.
Actualmente se cuenta con el acta desde la seremi de salud que señala las deficiencias sanitarias, que estarían provocando que la plaga de ratas prolifere. La decisión de no volver a clases, no solo se manifestó en representación de los docentes, sino de toda la comunidad educativa.
Camila Valenzuela, profesora del Liceo Industrial comenta respecto a los días de incertidumbre que han estado viviendo. «Sólo que se están exigiendo condiciones mínimas sanitarias para reintegrarse, de parte de toda la comunidad y si bien el Minsal se hizo presente y emitió un acta, respaldando nuestras demandas, de parte de ellos no hubo un pronunciamiento respecto de nuestra situación como empleados públicos; es decir, si con base en su inspección, estábamos en condiciones de volver o no al establecimiento. Solo nos comentaron que eso tendríamos que hablarlo con el empleador y que ellos llevarían a cabo un sumario a SLEEP», subrayó la profe.
