Ayer a las 7:00 recaló en Coquimbo proveniente de Valparaíso, el crucero Ruby Princess, con 3.080 pasajeros, que pasa ser el octavo navío de la temporada que arriba a la zona, el que causó la admiración de los porteños, debido a que la imponente figura del embarcación puede compararse con un edificio de unos 10 pisos de alto.
El Ruby Princess, de bandera de Bermudas, fue construido en el año 2008 en el astillero de la empresa Fincantieri en Trieste, Italia, y es el gemelo del Emerald Princess y del Crown Princess, todos pertenecientes a la compañía naviera Princess Cruises.
Desplaza 116.000 toneladas brutas, mientras que su eslora o ancho es de 290 metros, y la manga o ancho es de 36 metros.
Posee 19 cubiertas y cuenta con 900 camarotes con balcón privado que logra combinarse con espacios comunes muy bien decorados, como La Piazza, donde los pasajeros participan a las actividades que se hacen en ella, aparte de disfrutar de la música en vivo.
Por otra parte la nave cuenta con 5 piscinas con amplias cubiertas para disfrutar del sol, un cibercafé, un bar de helados, 4 piscinas internas, un simulador de golf de 9 hoyos, el spa Lotus, un gran centro de fitness, un teatro, una sala de espectáculos, un casino y una discoteca entre otros espacios como tiendas.
Otras de las atracciones que posee es una pantalla gigante de cine frente a una de las piscinas principales, además en la parte gastronómica esta dotado de cuatro restaurantes principales, el Da Vinci, el Michel Ángelo el Sabatini´s restaurante de cocina italiana y el Crown Grill de ambiente de finales del siglo XIX cuyas especialidades son las carnes y los mariscos.
El zarpe de la nave fue a las 18:50, mientras que el próximo puerto de destino es Pisco en Perú.
La turista canadiense Gail Turchansky, en diálogo con Diario LA REGION, expreso que lo que mas le gustó de Coquimbo, es la actividad pesquera que posee, «me lamo mucho la atención los pequeños barcos pesqueros de la bahía y la actividad de los pescadores que la vi en una pequeña caminata que hice».
Sobre la experiencia de tratar con los coquimbanos la pasajera dijo, «son todos muy amables, muy gentiles, nos han dado una hermosa bienvenida».
Felipe Zamorano, traductor e intérprete de la Corporación de turismo del municipio coquimbano, que entregó variada información en el idioma Inglés a los visitantes del crucero, dio a conocer cuales fueron los aspecto que mas les atrae de nuestra ciudad.
«A ellos le gusta la parte cultural y el buen trato que reciben de la comunidad, pero lo que más le llama la atención es encontrarse con lobos marinos en la Costanera y hasta los perros callejeros, a los que les sacan muchas fotos (risas)».
Otra de las actividades que más aprecian de acuerdo a Zamorano es realizar caminatas en que aprovechan de conocer la gastronomía local y el entorno del Barrio Inglés.
«Lo otro que les gusta es proba la variedad de productos del mar porque en sus países tienen altos precios, además les gusta pasear en cado puertos a los que llegan y como Coquimbo tienen un centro pequeño lo recorren inmediatamente y también les interesa mucho el Barrio Inglés.
