El temporal dejó caminos en mal estado, familias inundadas y una notoria falta de recursos humanos y materiales en el puerto. Lo anterior hizo que el alcalde Alí Manouchehri impulsara la reasignación de algunos recursos para ir en ayuda de este y otros problemas que aquejan a la comuna.
La octava modificación presupuestaria del municipio de Coquimbo considera reasignar recursos de horas extraordinarias para reparación de caminos y materiales para apoyar emergencias, junto con reparación de luminarias (para la segunda etapa de este plan el municipio invertirá $ 230 millones), y la atención de salud en los distintos centros de la comuna. Hoy habría sesión extraordinaria de concejo, instancia donde concejales deberán ratificar la aprobación unánime realizada en régimen interno.
Han pasado algunos días, pero se siguen viendo los baches en las calles y dramas post aguacero en el sector rural, Puerto Aldea, Parte Alta y sus campamentos, La Herradura, La Cantera, San Juan y Punta Mira. En ese contexto, el municipio se desplegó para realizar el proceso de levantamiento de la Ficha Básica de Emergencia (FIBE) a los vecinos afectados. Aquella ayuda se había quedado corta y era imperioso una «mano» municipal, agrega el concejal Guido Hernández.
«Sabemos que hay muchas familias que no son beneficiadas con ese recurso, por eso que el municipio generase otra vía, es algo que valoro mucho», sostiene el ex RN.
Desde el municipio porteño cuentan que el plan de austeridad, iniciado hace más de un año, habría permitido ahorrar recursos en horas extraordinarias, arriendo de casa de alcalde, restructuración de las excesivas prestaciones de servicios, arriendo de vehículos de alta gama y otros gastos.
Manouchehri presentó ante la comisión de régimen interno la octava modificación presupuestaria de este año, que consiste en reasignar 1.186 millones de pesos. Entre los principales montos de origen (recursos reasignados) están $ 465 millones de las cuentas de horas extraordinarias y de viáticos; junto al ítem otras entidades públicas que aportan $ 568 millones. De esta última arista se sacarían los recursos para combatir los embates que dejó el último frente de mal tiempo de hace dos semanas.
De acuerdo al desglose elaborado por el equipo del edil porteño, estos recursos serán destinados a la ayuda de emergencia por el temporal, que consisten en el arriendo de maquinarias para la reparación de caminos por $ 63 millones; motobombas por $ 13 millones; nylon para ayudar a familias afectadas por $ 15 millones, y la compra de insumos y vestuario especial para los equipos de emergencia municipal por $ 72 millones.
El asunto urge en el puerto. Fueron más de 1.500 los requerimientos en toda la comuna. Momentos complejos se vivieron, incluso el propio jefe comunal reconoció que se vieron sobrepasados.