Uno de los casos que tuvo consecuencias fue el video grabado en el supermercado Santa Isabel, ya que el empaquetador fue despedido del supermercado por grabar la situación, él justificó su actuar porque aseguró que quería denunciar lo que ocurrió con el guardia. Esta situación fue la que «hizo que se rebalsara el vaso» y los guardias se organizaron para formar su propio sindicato entre empresas. Ellos buscan mejorías laborales y formación ya que el millonario negocio de explotar el miedo cada día se hace más grande en Chile, pero las condiciones de trabajo van variando dependiendo de la empresa.
En Chile hay 3 veces más guardias que carabineros y eso hace que el negocio sea cada vez más rentable para los dueños de empresas de seguridad.
Hace cuatro años, se pedía para ser guardia el requisito de ya pertenecer a una empresa de seguridad, para ser un vigilante certificado, pero esto cambió ahora todas las personas particulares con octavo básico cumplido, mayores de edad, sin antecedentes penales, salud compatible y un curso de capacitación de 90 horas visado por el OS-10, podrán tener la calificación. Estos requisitos son los que Carlos Araya quiere que vengan también acompañados de derechos y estatutos claros sobre su labor ya que asegura que ante situaciones de inseguridad necesitan un buen respaldo, formación, asesorías jurídicas, sicológicas, capacitación y principalmente que conozcan sus derechos laborales.
Los guardias de seguridad tienen la misión de ver lo que está ocurriendo en el lugar donde trabajan y denunciar si ocurren robos, situaciones conflictivas u otras cosas que afecten a parte del personal y clientes, pero Carlos Araya asegura que hay empresas que «exigen un mínimo de 30 detenciones de personas en el mes ofreciéndole un precario bono, en este caso los guardias jóvenes se convierten en matones y nosotros estamos para apoyar la ley no para eso y si el guardia no tiene detenciones eso va a una hoja de vida y lo inhabilitan para ser contratado en otras empresas» expresó.
Los guardias de seguridad se reunirán el próximo miércoles a las 18:30 horas en la sede Panificadores ubicada en la calle Vicuña 680 y cuentan con el apoyo del presidente de la Central Autónoma de Trabajadores. Ese día esperan que lleguen todos los guardias de la región para concretar el sindicato que incluirá a todos los trabajadores del rubro.