Concluyendo un largo anhelo que surgió como iniciativa personal este martes, el alcalde porteño, Cristian Galleguillos, informó que las antiguas grúas alemanas marca Ardelt que prestaron servicios en el puerto local a contar de la década del 50, fueron entregadas a la casa consistorial para su preservación, gracias a la sesión de la empresa Terminal Puerto Coquimbo, TPC, de Neltume filial de Ultramar que ganó la licitación de las instalaciones portuarias en el 2011.
«Como sabemos el progreso llega y nuestro puerto se ha licitado y las antiguas grúas debían ser desguazadas o sea desarmadas para ser vendidas como chatarra y eso no puede ser, por eso nosotros hemos dicho que queremos preservar esas grúas y las hemos pedido con los concejales y es así que han sido traspasadas a la municipalidad y esas dos grúas a contar de hoy son municipales, de todos los coquimbanos».
Galleguillos añadió que ya hay una planificación para ver el lugar en que sean apreciadas por los habitantes de la ciudad y los turistas. «Vamos a tener que hacer un esfuerzo por restaurarlas, por trasladarlas y para ubicarlas en un lugar importante de Coquimbo, para que queden para el futuro».