El jefe comunal señaló que aún no tiene claridad si los fondos de la empresa Enjoy llegarían a la cuenta del municipio, por lo que insistió en que leaseback es el mejor mecanismo que hoy cuenta la entidad para inyectarse de recursos frescos y sanear una deuda que según el mismo expresa, traspasaría los 40 mil millones de pesos. En paralelo, ex edil Marcelo Pereira, señaló a este medio que el nuevo contrato amarrado en su administración con el casino, permitirían que la municipalidad reciba 19 mil millones al año, a contar del 2022.
La máxima autoridad recuerda que en los últimos años de mandato del demócrata cristiano, se habrían cancelado con los supuestos dineros del casino (que no llegaron por razones del estallido y de la pandemia), una serie de situaciones y contratos que inflaron mucho más la crisis.
«No podemos proyectarnos. El error más grande que hubo es que siempre se imaginaron los recursos del casino y cada una de las problemáticas que se iban dando en ese trayecto, se postergaban los pagos. Se proyectó presupuesto, se aumentó la planta, contrataciones, gastos, viáticos, viajes, todo eso, se hizo con las platas del casino. Esos recursos no llegaron y hoy están gastados. Entonces no puedo cometer el mismo error mientras no tenga la claridad que esos fondos van entrar», dijo Alí Manouchehri, en un punto de prensa realizado en jornada del jueves.
Insiste en que el proceso de leaseback, que ayer tuvo su partida inicial con la aprobación de la puesta en marcha de parte del concejo municipal, es el mecanismo más directo y a mano que tiene para salir del hoyo financiero.
Y aunque el médico cirujano (Pereira) había sido fue enfático en decir que la nueva administración tuvo mejor suerte que la suya, con respecto a la reapertura post cuarentena que tuvo el casino, Alí agrega que día a día le aparecen más deudores que lo tienen «acogotado». En esa línea, se cuadra con la de idea de traspasar un bien inmueble a una entidad financiera, con el objetivo de hacer la solicitud de 20 mil millones de pesos. Sin embargo, aclara que tiraron «lejos el tejo», ya que los montos aprobados serían mucho menores finalmente.
«Se ha generado una sensación de que el concejo votó la enajenación o la puesta en prenda de los de los inmuebles, y eso es falso. Nosotros recién estamos en el inicio del proceso. Este es un proceso largo, el leaseback anterior, con todas sus fallas, se demoró alrededor de 9 meses, para que finalmente se aprueben solo 3. Estamos intentando agilizar todo esto para ir ganando tiempo. Este leaseback, dentro del ordenamiento y el cargo directo a la cuenta corriente del municipio a diferencia del leaseback anterior, lo vuelve un proceso netamente distinto.»
Aquello hace referencia a abril del 2018, cuando la administración Pereira y el concejo de ese entonces, decidieran pedir el mismo mecanismo que hoy acude Manouchehri. En la ocasión, Hacienda les aprobó 3 mil millones que finalmente no vieron luz verde, ya que desde el municipio no habrían ingresado una cláusula fundamental que instruye el cargo directo a la cuenta corriente del municipio.
Además, uno de los inmuebles enajenados en el sector de La Herradura pasó a hacer área verde por el nuevo plan regulador, por lo tanto, no pudieron cerrar la petición. A pesar de tener los montos aprobados, el proceso de licitación no se generó, debido a que ningún banco habría postulado en el proceso.
El estadio Francisco Sánchez Rumoroso ha estado en el centro del debate. El ambiente ha estado tenso sobre todo en las últimas horas. La barra del Al Hueso Pirata expresó en sus redes que «busquen otro bien inmueble para negociar», ya que «con el estadio no se juega».
Y es que el recinto deportivo, al ser el único inmueble público en la actualidad que se encontraría tazado, (32 mil millones), fue utilizado como respaldo en esta primera instancia para permitir que la municipalidad iniciara este proceso.
No obstante, y según lo mencionado por el alcalde, cuando el ministerio de Hacienda determine el monto que les entregaría, el municipio ya tendría tazado otras 17 propiedades para poder hacer un enroque del añorado inmueble social puesto en garantía. Aquello, el edil promete que sería una instancia legal.
«Como voy a poner en riesgo el patrimonio del estadio. Yo que soy coquimbano y cada vez que vuelvo a pisar su cancha se me eriza la piel. La gente debe entender que este solo es el primer paso de un proceso largo, aun ni siquiera se ha votado poner en prenda algún inmueble, eso lo veremos después y en votación de concejo».
Una serie de requisitos deberá sortear la municipalidad para contar con los recursos. La entidad deberá presentar proyecciones de ingresos, gastos y cooperaciones. Detalles del plan de austeridad. Informe de la situación deudora del municipio (deuda actual y de los 5 años previos a la presente solicitud). Otro informe de la operación leaseback anterior. Activos de respaldo de la operación leaseback. Y una simulación financiera de la operación de entidad bancaria.
Orlando Robles, economista ULS, asegura que la iniciativa del leaseback es una alternativa válida, que ya que distinto sería «si se quedara con brazos cruzados» esperando generar recursos para ir saneando la crisis. Y aunque sea pagar «deuda con otra deuda», la idea es ir ganando tiempo.
«Lo que está haciendo él (alcalde) es ganar tiempo para una gestión que sabe que toma tiempo. Pero el municipio tiene que preocuparse, ya en un plazo mayor, en aumentar los ingresos y reducir los gastos, es matemática sencilla, no puedo gastarme más de lo recaudado. Yo creo, en un juicio de valor, que el pagar la deuda de Coquimbo, va exceder el periodo de Manouchehri, en 4 años no se resuelve», cerró el académico.