Una visita a la Región de Coquimbo realizó el presidente del Colegio Químico Farmacéutico de Chile, Mauricio Huberman, quien se reunió con los profesionales del sector para analizar la implementación de la Ley de Fármacos y los problemas con el reconocimiento de la especialidad farmacéutica. El dirigente también sostuvo un encuentro con el seremi de Salud, Rosendo Yáñez, En medio de su apretada agenda en la zona habló con Diario La Región.
– ¿Cuáles son los principales problemas que ha tenido la implementación de la Ley de Fármacos?
– «Tiene que ver con la presencia del farmacéutico en la pequeña y mediana farmacia, el sobretiempo que explotan las grandes cadenas sin profesionales, también las fiscalizaciones que se han aplicado a todos por igual. Estas deberían estar proporcionales al capital de trabajo, porque no es lo mismo una farmacia pequeña que una grande. Ello porque podemos perder el acceso que hay en algunos sectores a estas farmacias más pequeñas».
– ¿Cómo ha funcionado la formación de farmacéuticos?
– «Ha estado bien y de a poco ha ido aumentando. Recién se acaba de abrir la carrera de la Universidad de La Frontera en el sur, donde no existía».
– ¿Existen campo profesional suficiente para estos profesionales?
– «Lo que pasa que hay una gran cantidad de carencias en el Estado, que tiene muchas farmacias disfrazadas de botiquines. Son lugares que deberían estar con profesionales pero es una manera que ha usado el Estado para bypasear la Ley. El Estado no cumple con ello, aunque pide hacerla cumplir. Nosotros estamos hablando con todas las autoridades de Chile para que vayan haciendo un proyecto donde se traspasen todo este tipo de espacios a farmacias».
– ¿Cuál es la importancia de hacer aquello?
– «Hay un control adecuado de los medicamentos, una información adecuada con los profesionales y hay una buena gestión para evitar los robos. Hoy los robos son a manos llenas. Un 70 por ciento de los medicamentos que vemos en las ferias son robados al Estado, y eso creemos nosotros que hay que pararlo de una vez».
– En el caso de las pequeñas farmacias… ¿Han ido a la baja?
– «Aunque no lo crea en los últimos cuatro años casi se han duplicado y eso ha demostrado que han podido competir. Las farmacias independientes que antes representaban el 5 por ciento de las ventas hoy representan el 10 por ciento. Lo que sí nos preocupa es que las cadenas han buscado una nueva forma de crecer y han creado a una farmacia intermedia, similar al Doctor Simi. Crearon FarmaPrecios y FarmaRebajas para tratar de quebrar al Doctor Simi».
– ¿Cómo han visto el tema de la automedicación?
– «En Chile hay dos problemas graves; la automedicación sin consultas profesionales y lo segundo tiene que ver con la adherencia a los tratamientos. La mayoría de la gente no termina los tratamientos con medicamientos y los deja en la mitad. Eso tiene que ver principalmente con la educación».
. ¿Cuál es su opinión de las llamadas Farmacias Populares?
– «Nos parece fantástico todo lo que mejore el acceso de la gente a los medicamentos y también que se vayan a abaratar los precios en algunas ámbitos. Pero no toda la información que ha salido sobre las farmacias populares es real. Hemos escuchado a personas que dicen, yo me cambio de comuna de Recoleta y compro todos los medicamentos. Y eso no es así. Primero la farmacia de Recoleta está autorizada para una venta cerrada, no puede vender a público. Se le autorizó un grupo de medicamentos especiales. La otra limitación es que la municipalidad no puede entregar allí ningún medicamento del sistema APS, ni GES ni Auge, que son gratuitos. En realidad esta es una obra social complementaria a otras que da gobierno y recurre a un grupo de medicamentos que es muy pequeño y no cumple con la batería grande de medicamentos que son los mayoritarios. Las personas tampoco pueden acceder con recetas del sistema público, por lo tanto los que pueden recurrir a estos medicamentos son los que tengan recetas de médicos privados y con medicamentos fuera del sistema público. En conclusión, no son todos los medicamento, ni es de venta libre para todos, es un sistema cerrado que tiene una serie de restricciones».
– ¿Y ustedes los han asesorado?
– «Nosotros trabajamos con ellos hace más de un año. Los orientamos en todo, pero antes. Lo que hoy hemos dicho es que no vamos a dejar que se discrimine en el sentido de que pueda haber venta al público, porque eso perjudicaría toda la lucha que han tenido las farmacias independientes».
