Desde el Colegio Médico aseguran que la autoridad no ha fijado los criterios «para permitir o no la realización de los comicios», y que la realidad epidemiológica «no es muy distinta a la que hemos visto durante los últimos meses», dijo el presidente regional Rubén Quezada.
La situación epidemiológica actual, y la que existía previo a la fecha original de abril, es un tema que en el Colegio Médico no han querido obviar. Menos aun cuando faltan 10 diez para las elecciones de alcaldes, concejales, gobernadores y convencionales constituyentes.
En la región, cuenta el presidente regional Rubén Quezada, en reiteradas oportunidades han informado que «deben existir parámetros para saber cuándo se pueden realizar las elecciones y que esto le corresponde a la autoridad poder fijarlas de manera clara».
Por eso lamenta que «hasta la fecha no hayan fijado parámetros objetivos para poder determinar cuándo hacer elecciones o no y eso siempre genera incertidumbre».
Falta de rigurosidad
Cree el médico que «ha existido una falta de rigurosidad por parte de la autoridad para poder determinar cuáles son los parámetros objetivos para realizar las elecciones».
¿Cómo era la situación 10 días antes de la fecha original de los comicios?
«No es muy distinta a la que hemos visto durante los últimos días. Además, la autoridad no ha fijado los criterios para permitir o no la realización de las elecciones y una vez más pareciera quedar al arbitrio de intereses más allá de lo sanitario», afirma Quezada.
Lo cierto es que el 31 de marzo restaban 10 días para que se realizaran los comicios en la fecha antes programada, y para entonces se informaba de 76 casos activos nuevos. Mientras que en el reporte sanitario de ayer se anunciaron 81 casos.
Los pacientes hospitalizados entonces eran 237 y 91 se encontraban en ventilación mecánica, con el 76% de ocupación en las residencias sanitarias. Ayer, la autoridad comunicaba que 205 son los pacientes hospitalizados, que 78 permanecen en ventilación mecánica y que las residencias sanitarias tienen un 61% de ocupación.
«Hoy la región presenta un 77% de ocupación general y dispone de 272 camas. De este número, 23 pertenecen a la Unidad de Paciente Crítico, siendo 14 de la Unidad de Cuidados Intensivos, UCI, donde se encuentran los pacientes en condición de mayor gravedad, y 9 de la Unidad de Tratamiento Intermedio, UTI», dijo el director del Servicio de Salud Coquimbo, Edgardo González.
No hay criterios
Hasta la fecha, el debate sigue siendo el mismo. Asegura Quezada que el Colegio Médico lo ha conversado en el Congreso, con el Servel y con ejecutivos, «de que es necesario implementar soluciones concretas para tener elecciones seguras».
Ante eso, afirma que las elecciones del 15 y 16 generarán una exposición y que justamente por eso «hemos planteado el voto anticipado, locales de votación abiertos, aumentar los espacios de votación y el transporte público gratuito. Y si es que aun así se van a implementar estas elecciones, solicitamos que se hagan medidas concretas para poder prevenir los contagios que se puedan generar».
Respecto a los parámetros, Quezada argumenta que el Colegio ha propuesto, por ejemplo, «que la ocupación de la red asistencial sea menor que el 95% y que los pacientes hospitalizados debiesen ir a la baja sostenida.
De la misma manera, el RE debiera ser menor a 1 al menos durante dos semanas y con eso también una disminución progresiva de los casos activos en las últimas dos semanas. Y todo eso debió haber sido revisado periódicamente para poder tomar la determinación».
Ahora si tuvieran que priorizar, reconoce que «estamos planteando que sea la ocupación asistencial si es que ocurren nuevos contagios, para poder tener camas disponibles para los pacientes. Pero, sin embargo, pareciera ser que la improvisación es lo que está mandando y no hay parámetros claros».
Dice entender que esta elección le corresponde al parlamento y a las autoridades poder fijarlas, «y si es que ya está decidido realizarlas, nosotros haremos el llamado para que las autoridades implementen todas las medidas de seguridad para que sea un proceso seguro».
Insiste que tener una alta ocupación de la red asistencial, ya sea por pacientes hospitalizados o por falta de camas críticas, «implica que si se llegan a producir contagios producto de esta u otra actividades, se debe también a que estas elecciones se dan en un contexto de aperturas y desconfinamiento muy precoces. Pero si tenemos una alta ocupación y vamos agregando actividades y riegos, existe la posibilidad de una saturación de la red asistencial».