Desde Comunes y Convergencia Social esperan que sea una «responsabilidad compartida y equitativa, más allá de los pesos específicos en términos de la cantidad de autoridades de cada partido». Qué dice el PC: «No
tenemos ninguna intención de ser hegemónicos al interior del pacto».
Son 24 ministerios y más de 800 cargos, entre los que están las subsecretarías y seremías, amén del delegado presidencial, que si bien tiene un límite -puede durar incluso más de un año- antes de su eliminación se requiere de un decreto de ley.
El presidente electo Gabriel Boric no quiere pasar más allá del 22 de enero para entregar los nombres de la primera y segunda línea. De ahí a regiones en busca de los nuevos seremis y directores de servicios.
¿Habrá cabida de los militantes del PPD, PR o PS? Eso tiene que ser analizado junto a Apruebo Dignidad a nivel nacional.
«Pero si hay que ceder para integrar independientes, por ejemplo, lo haremos; y si hay que ceder para integrar a otros partidos políticos, también lo haremos. El 8 del próximo mes vamos definir los criterios de las seremías que nos interesan potenciar en función del programa del Presidente, pero sincerando el número, es parte de la negociación, y como lo ha planteado el compañero Guillermo Teillier (diputado y presidente del PC), no tenemos ninguna intención de ser hegemónicos al interior del pacto», reconoce el presidente regional del Partido Comunista, Gonzalo Escorza.
Mientras sigue la danza de nombres, en Apruebo Dignidad se toman este proceso «con calma y tranquilidad», pues como asegura Jhony Muñoz, de Comunes, «hoy todo es especulación. Estamos buscando qué es lo que queremos de cada partido y hacer la pega bien, en eso estamos. Porque más allá de buscar el posicionamiento de personas, representantes para cada colectividad, la idea es buscar cómo plasmar lo que se ha propuesto».
Desde Convergencia Social, su presidente Sebastián Morales explica que «a nivel local tenemos la mesa política de Apruebo Dignidad, y lo ideal es que vayamos avanzando desde ese espacio para llegar a ciertos acuerdos y consensos de propuestas, entendiendo que la palabra final siempre será del Presidente electo. Sin embargo, queremos que los cargos, tanto técnicos como políticos, sean para personas que tengan un desempeño en la región».
A disposición
Nada por ahora está definido. Aún hay conversaciones «y nosotros estamos un proceso de elaboración, de una evaluación», cuenta Escorza.
En las próximas semanas se reunirán para definir las incorporaciones, y una vez que se haya definido, «comenzaremos las negociaciones con los demás partidos del Frente Amplio y posteriormente poner nombres sobre la mesa», avisa.
Si bien todo será después del 22 de enero, no antes, «tampoco nos quita el sueño, más bien estamos preparados para lo que haya que hacer. ¿Delegados? Nos ponemos a disposición, pero los criterios, como se ha mencionado a nivel central, son mezcla de juventud y experiencia, la paridad de género en las seremías, y sobre esa base vamos a trabajar, ese es el criterio».
En ese contexto, y pese a que ya han surgido nombres de militantes del PC para llegar a la delegación presidencial y a algunas seremías, Escorza explica que «tenemos más de dos nombres, tenemos más ideas, y más visiones. En cuanto a Javier Vega -Core que suena como delegado en una terna junto a Fernando Viveros y el frenteamplista Alex Garrido- capaz que se proyecte como futuro gobernador o parlamentario, o decida dedicarse a su vida profesional, que es como también se desarrolla la vida al interior del partido, pues no es obligatorio estar en primera línea…».
A juicio de Morales, a nivel central se está trabajando en que todo sea paritario, heterogéneo, etario, «y esos criterios se están proyectando para que puedan enfocarse en las regiones».
Esto, porque existe un interés de descentralización del programa, y en eso «es evidente que las personas deben tener una mirada regional fuerte y que sean líderes o lideresas con una trayectoria en trabajo político, que conozcan la región, que tengan un trabajo previo -ojalá en la región- y que tengan una adhesión completa al programa».
Convergencia Social es justamente el partido del Presidente electo, «y entendemos que existe una responsabilidad importante. Pero en esa misma dirección nos parece fundamental apelar a ciertos cargos que tengan una direccionalidad de gobierno desde el nivel central. Más allá, como partido y Apruebo Dignidad, las delegaciones presidenciales, por ejemplo, deben estar en consonancia con el programa de gobierno, e incluso más allá de que sea un cargo que tenga un límite…».
Para el dirigente, «lo fundamental es que tenemos una responsabilidad compartida y equitativa en este rol, más allá de los pesos específicos en término de la cantidad de autoridades de cada partido. Nosotros estamos apelando a que exista un equilibrio de fuerzas políticas».
Misma opinión tiene desde Comunes Jhony Muñoz, «porque por encima de los intereses de los cupos y personas, tenemos intereses en defender las propuestas de las ideas. No estamos acá jugando en poner las cartas sobre la mesa y tirar este u otro nombre. Esto lo estamos tomando con mucha seriedad, porque justamente queremos ser responsables con la propuesta que nosotros hicimos como gobierno. Por ejemplo, no queremos ingenieros comerciales en educación, ¿me entiende? Lo que estamos buscando es generar las conversaciones frente a la instalación de gobierno».
Tampoco hay que descartar a los constituyentes, toda vez que la Convención Constitucional podría ser un semillero de rostros para el nuevo gobierno, considerando que sus miembros terminarán su tarea el próximo 4 de julio.