Una serie de reacciones generaron las declaraciones formuladas por el Ministro de Obra Públicas, Alberto Undurraga, durante su última visita a la región. La autoridad indicó se darán «las recomendaciones técnicas para avanzar en el aeropuerto de Tongoy».
A ello se sumaron las palabras del alcalde de Coquimbo, Cristian Galleguillos, quien afirmó que «el diseño del proyecto está como prioridad en el Ministerio, en la Dirección Nacional de Aeropuertos, para volver con esta iniciativa tan importante, de manera que cuando termine la concesión del aeródromo La Florida podamos tener un aeropuerto internacional, como la región se merece».
El concejal de La Serena, Lombardo Toledo, afirmó que «considera que esta información es inoportuna, y con esto no estoy rivalizando con nuestros amigos de la comuna de Coquimbo, especialmente con su alcalde, sino que lo que quiero decir es que existen una serie de otras obras más importantes que el aeropuerto. Creo que se está distrayendo a la opinión pública. Por ejemplo, necesitamos un nuevo puente a Las Compañías, la rotonda Amunátegui, hay muchas obras viales en el sector rural que requieren que se jerarquicen antes de una terminal aérea».
Toledo afirmó que también existen otras prioridades vinculadas a poder solucionar los problemas vehiculares que se viven en la conurbación La Serena – Coquimbo. «Hay que apostar a las grandes obras, a escuchar a la ciudadanía, con esta noticia no se está haciendo y creo que las autoridades están equivocando el norte que tenemos. Uno está escuchando a las personas», indicó.
En tanto, Marcelo Castagneto, consejero regional, indicó «que cada vez que el ministro de Obras Públicas viene la zona saca el tema del aeropuerto y lo hace fuera de contexto. Se sigue hablando de un estudio de demanda de un aeropuerto, pero nunca se ha sido claro en señalar cuáles son las líneas aéreas que van a operar desde allí o que aseguren que vamos a tener un aeropuerto realmente con vuelos internacionales. Si es así, creo que sería razonable, pero en Chile tenemos un aeropuerto internacional y no creo que las autoridades estén propiciando otro a menos de 400 kilómetros de distancia. Eso no tiene ninguna lógica ni económica ni técnica».
La autoridad recordó que «el gobierno compró con recursos del Gobierno Regional compraron los terrenos en Tongoy, a una cifra superior a los 3 mil millones de pesos, por tanto tienen ahí un elefante blanco, un terreno que tienen que ocuparlo. Debajo de ese terreno hay pertenencias mineras, y además toda esa zona se ha llenado de parcelas de agrado. Se están gastando 180 millones de pesos para este estudio de demanda que me parece ilógico realizarlo ocho años antes de la licitación. Me parece poco serio, y podemos perder la conexión aérea, tenemos el ejemplo de Chillán que es un elefante blanco». Esta iniciativa se remota, al año 2000, cuando se dio a conocer un informe técnico de la Dirección General de Aeronáutica Civil manifestando la factibilidad de emplazar un aeropuerto en Tongoy y que el Aeródromo La Florida no cumplía «con las condiciones de seguridad deseables, para un emplazamiento de esta naturaleza».1
En 2003, durante el gobierno del presidente Ricardo Lagos, este proyecto fue declarado como una de las Obras Bicentenario, de modo tal que debía estar concluido para el año 2010. Entonces se indicó que el Ministerio de Hacienda había autorizado la adquisición de los terrenos necesarios y, además, el pago de la indemnización a los concesionarios del aeródromo La Florida.
La municipalidad de La Serena inició una campaña en contra del proyecto de aeropuerto en Tongoy, con la leyenda «que no nos corten las alas», con el apoyo de la alcaldesa Adriana Peñafiel (RN) y la totalidad del concejo municipal. También se manifestaron en contra de este proyecto, planteando la existencia de supuestas irregularidades, el diputado Darío Molina (RN) y la senadora Evelyn Matthei (UDI).
La municipalidad de La Serena decidió culminar la campaña a favor del aeródromo La Florida, el día 3 de julio de 2003, con una caravana con 52 buses transportando a cerca de 2.000 serenenses a la ciudad Santiago.