Ciego de ira, en medio de una disputa con su pareja ocurrida este martes al interior de la casa en que viven en el pasaje Narciso Herrera, de La Cantera de Coquimbo, Francisco Pérez Ávila, de 20 años, tomó a su hija de tres meses, E.E.P.S., a la que arrojó contra una cama, causándole un golpe en el cráneo, que le provocó lesiones que la mantenían con riesgo vital hasta este miércoles al cierre de esta edición, en el hospital San Pablo, motivo por el que el sujeto fue arrestado.
Luego del ataque, el progenitor de la niña fue a entregarse a la Subcomisaría de Tierras Blancas, por lo que el Ministerio Público dispuso que fuera entregado a la Brigada de Homicidios, de la Policía de Investigaciones, PDI, por el cargo de parricidio frustrado.
En declaración ante funcionarios de la Brigada de Homicidios, el imputado admitió haber agredido a la niña, durante una fuerte discusión con su pareja debido a que la lactante lloraba mucho.
Concluida la toma de declaración, Pérez fue remitido ayer al Juzgado de Garantía para la formalización de investigación por parricidio frustrado.
Por otra parte, la menor fue tratada por los médicos del hospital coquimbano al que fue llevada por su madre, por un Traumatismo Encéfalo Craneano, TEC, con fractura con hundimiento de la zona occipital y por una hemorragia intracraneal, que la mantenían conectada a ventilación mecánica, con peligro de muerte al cierre de esta edición.
La fiscalía, en la formalización de la investigación por el delito de parricidio frustrado, solicitó la prisión preventiva, la cual fue acogida por el Tribunal, determinación que de acuerdo a la fiscal Gabriela del Campo, también tuvo base en las agravantes del ataque.
«En atención a que el imputado representa un peligro para la seguridad social, por la pena asignada al delito y por la lógica desproporción de la fuerza, lo cual hace que este hecho sea sumamente grave», explicó la fiscal.
Por otra parte, el Tribunal concedió 90 días como plazo para que la fiscalía realice las indagatorias.