Tras una visita protocolar, las autoridades se mostraron entusiasmadas con su restauración, dado que este inmueble histórico y patrimonial se utilizará en los fines para lo que fue creado en 1949,que es la cultura.
El Teatro Centenario, edificio tradicional del centro serenense, ya luce diferente. Tiene una nueva cara y después de cuatro años de encierro, será reabierto tras las obras de restauración este 31 de octubre, con la presentación de la artista nacional Javiera Mena.
Por eso ayer fue visitado por el delegado presidencial y el seremi de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, quienes quedaron encantados con los trabajos de Teatro Centenario SPA, empresa que subarrienda el edificio y que se ha encargado de devolverle el esplendor a su sala.
«Muy feliz con esta noticia de poder reactivar lo que será el Teatro Centenario, y no solamente desde la lógica de la recuperación de espacios públicos, que es algo que estamos viviendo con fuerza en el centro de La Serena y que va a estar en Coquimbo, sino porque acá hubo una operación de rescate de un valor patrimonial que se vio amenazado, y gracias a un trabajo conjunto con la iniciativa privada, con un enfoque público, se puede regresar a la ciudadanía un espacio de cultura, de patrimonio y de convivencia, sobre todo después de pandemia», dijo el delegado Rubén Quezada.
Para el delegado la sola idea de que este espacio pudiera estar convertido hoy en un mall chino, como se habló en su momento, o en otro tipo de instancia, «sin duda que a todo quienes lo recuerdan con cariño y ven con esperanza lo que será durante los próximos meses este lugar, no nos podía dejar indiferente».
Cedric Steinlen, seremi de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, manifestó su felicidad de que este inmueble histórico y patrimonial se utilice para los fines que fue creado en 1949, que es la cultura, «pero también que tenga una remodelación según los estándares patrimoniales, lo que es fundamental. Y nos interesa mucho que el trabajo que se haga en este teatro también se realice de la mano de los artistas y gestores culturales de la región».
Sebastián Bravo, representante de SPA, reconoció que este tiempo ha sido intenso, «pero también un trabajo con mucho cariño e ilusión, pues hemos querido rescatar los aspectos patrimoniales e histórico del edificio, pero a la vez transformar su uso original, que fue un cine, a un teatro para las artes escénicas, culturales y musicales en vivo. Justamente por eso ha recibido una serie de modificaciones que permiten la ampliación del escenario y camarines para recibir a los artistas, por ejemplo. Este es un edificio súper accesible, ya que se eliminaron los peldaños y escalones que había originalmente para poder hacer un edificio inclusivo y además, abrirlo a la comunidad serenense y regional».