En Renovación Nacional no existen dobles lecturas respecto a la situación que hoy vive el alcalde de Salamanca, Fernando Gallardo, luego que este lunes se dictara una orden de detención en su contra por el no cumplimiento del pago de una obra en la comuna por la constructora Ingeniería y Construcción Puerto Principal S.A., por más de mil millones de pesos.
Su presidente regional, Emilio Lazo, le entregó su irrestricto respaldo. Y aseguró que pese a la acusación que hoy emana en su contra, seguirá siendo el candidato del partido para la reelección, «de eso no cabe duda», apuntó.
Y claro, pues para Lazo y la directiva la situación es clara: «Creo que Fernando está pagando el legado que recibió del ex alcalde Gerardo Rojas, militante del PPD, con un déficit de 4.700 millones de pesos, con proyectos efectuados y otros no. Nosotros somos respetuosos de las institucionalidades, los organismos están funcionando, como la fiscalía y contraloría, y en algún momento se aclarará todo», afirmó.
Si bien en RN aseguran que la deuda se arrastra desde la administración anterior, a cargo del ex alcalde, lo cierto es que la empresa constructora Puerto Principal, a cargo de los trabajos de soterramiento del alumbrado público de la Avenida Infante, presentó una demanda en contra del municipio de Salamanca, la que fue presentada en el Juzgado de Letras de Illapel, determinando orden de arresto contra el hoy alcalde y militante RN Fernando Gallardo.
«La orden de arresto tiene su origen en una deuda que arrastra la municipalidad desde el año 2016, época en que Minera Los Pelambres, mediante un proyecto de transferencia que se denominó Viva Salamanca, financió uno de los proyectos de soterramiento de Avenida Infante, que se pactó con el pago en tres cuotas por parte de la municipalidad, fondos que tenían que ser transferidos en la medida que se ejecutaran los avances, como corresponde a cualquier obra pública», señaló el secretario regional del partido, Jorge Villar.
Y agregó que «el primer pago fue en el mes de julio de 2016, por 644 millones de pesos, el segundo en noviembre del mismo año, por 645 millones, y el tercer pago fue de 695 millones. Sin embargo, del primer pago y del dinero que recibió el municipio solamente se pagaron 150 millones, y no se sabe qué pasó con el resto, mientras que en el segundo pago no se canceló ningún peso a la empresa, y el tercero, cuando ya había asumido Fernando Gallardo, en diciembre del 2016, fue cancelado de manera íntegra a la empresa constructora, por lo tanto queda muy claro que los problemas son con los dos primeros pagos municipales, y que evidentemente debieron haber sido efectuados por el alcalde anterior».
Asegura Villar que «la deuda histórica de Salamanca siempre fue del orden de los 1.500 a 1.800 millones de pesos, que es una deuda razonable, toda vez que el presupuesto anual de la municipalidad bordea los cinco mil millones de pesos, pero según el informe de contraloría del año 2017, la deuda que se generó durante la administración de Rojas llegó a los 4.800 millones de pesos, lo que significa partir con un año entero de deuda, cosa que nunca había ocurrido en la historia».
Respecto a las consecuencias políticas que podría traerles como partido, principalmente a Gallardo, pensando en las próximas elecciones municipales, comentó Villar que «las consecuencias políticas lo tendrá que resolver la gente, ya que ellos tienen que ver si la comuna de Salamanca está mejor administrada por Fernando Gallardo, que es lo que creemos nosotros, o por el anterior alcalde».