Asegura el edil de la comuna de Ovalle que no tiene ninguna aspiración más, salvo ir por un tercer periodo en la casa edilicia, y que después se irá a su casa, se sentará en la Plaza de Armas «y veré a mis muchachitos que pasean por ahí, pues seré un ferviente fiscalizador de las acciones de mis funcionarios eficientes que voy a dejar en la municipalidad…».
Reconoce no volverse loco con la exposición y que tampoco aspira a dar el salto de su vida en una carrera política, que comenzó un siete de diciembre del año 2012, cuando fue elegido por vez primera alcalde de Ovalle.
Sin tapujos, Claudio Rentería dice ser «lo opuesto» y un «alcalde atípico» a sus antecesores. Su alto porcentaje de votación -cerca del 70%- en el segundo periodo, le dejó una responsabilidad mayor, pese a las críticas de sus detractores, que incluso le han pedido renunciar.
La gente lo saluda. Le agradece lo hecho, especialmente las personas de la tercera edad, que pronto tendrán en el hospital viejo un lugar de encuentro. Y por ese cariño, el que «me siguen demostrando día a día», es que ya tiene decidido ir por un tercer periodo y así continuar imponiendo su sello, «el que ya está implementado al interior de la municipalidad y en mis funcionarios. He llevado a cabo un sello distinto al trabajo, a la política que existe en este país», asegura tajante.
En un tiempo se realizarán las elecciones a gobernador regional, romería importante en la región y para los partidos políticos. Por lo mismo es que muchos nombres han comenzado a sonar. El suyo, casi en broma o casi en serio, es uno de ellos. Sin embargo, este alcalde, con más de 38 años en la municipalidad, incluso pasando por todos los cargos «y sin haberle aserruchado el piso a nadie, sino que gracias a la voluntad del pueblo», tiene claro que su camino va por otra dirección.
«Hace poco me preguntó un desubicado que si era candidato a gobernador y lo descarto altiro, así que no me preguntes por eso y tampoco tengo idea de dónde viene ese rumor. ¿Es una talla, verdad? Yo quiero ser un buen alcalde de Ovalle y punto. No tengo ninguna aspiración más, menos eso de gobernador regional, así que está descartado», cuenta Rentería, que para muchos es un superhéroe, un Quijote que persigue molinos de viento para descabezarlos. Pero para otros un villano, al que le piden su salida, después que en el mes de diciembre fuera notificado por su presunta responsabilidad administrativa en el déficit financiero del Departamento de Educación Municipal, monto que ascendería a los casi 7 mil millones de pesos.
«En la municipalidad hicimos un levantamiento con varias observaciones a lo sucedido y el organismo contralor accedió a la reapertura del sumario y ha nombrado un nuevo fiscal y punto. ¿Algún inconveniente con esta acusación? El que nada hace nada teme, mi amigo. Soy el mejor alcalde la provincia de Limarí y de la región también. El año 2017 fui elegido el cuarto mejor alcalde del país y eso se traduce en un trabajo que hemos realizado con los funcionarios municipales, ya que he tenido la colaboración de todos. También quiero reconocer la labor que hemos hecho con los señores concejales, así que mire lo que le estoy diciendo. Usted no se puede imaginar, pero bueno, hemos hecho grandes proyectos e iniciativas que han sido aprobadas por los señores concejales y eso es lo que hay, para qué le voy a estar mintiendo», finalizó.
Todas esas críticas no lo sacan de sus objetivos. Menos dejar todo e irse a descansar. Todavía, advierte, no es el tiempo.
«¿Usted cree que estoy cansado? No lo estoy, sino que agradado por este trabajo y desarrollando mi cargo con mis funcionarios municipales para darle, de esta manera, un mejor beneficio a la comunidad. Estoy entretenido, porque la municipalidad está en buen pie. ¿Sabe? Estamos desarrollando proyectos de inversión que sirvan para la comunidad. A partir del segundo semestre haremos proyectos de inversiones en la segunda etapa de La Alameda. De igual forma estamos haciendo el proyecto de diseño en el edificio consistorial y estamos a las puertas y creemos que en el mes de junio o julio, la empresa va a entregar el diseño con todos los antecedentes para que pueda materializarse un anhelado sueño que necesitan los ovallinos, pues tenemos muchas oficinas arrendadas, casi 25, y en ese sentido queremos tener un solo lugar en el cual los servidores públicos, como los funcionarios y el alcalde, le demos respuestas claras y precisas a la comunidad».
Alcalde, jurando con la mano en la Biblia, como cantan Los Golpes, ¿va por un tercer periodo?
«Claro que voy por un tercer periodo, señor, y así continuar con los proyectos, como el edificio consistorial, porque creo que de acá a un año estarán los recursos y vamos a terminarlo en el próximo periodo. Pero para que se apronten los nenes: para un cuarto periodo no voy. En ese sentido voy a tener cuatro años para capacitar a alguna otra persona para que pueda desarrollar la hermosa actividad que hemos realizado en estos años para continuar por otros años más. Así que sí o sí iré por un tercer periodo como alcalde de Ovalle, debido a que estoy muy complacido, agradado de trabajar tranquilo, ni estresado, ni nada».
¿O sea que se siente seguro?
«Ya pue, si las elecciones se ganan en las urnas. Pero si no convenzo yo, qué le voy a pedir a los demás. Tengo la confianza de estar haciendo bien mi trabajo y eso se ha traducido en mayores sedes comunitarias, en campos deportivos, en plazoletas, juegos infantiles… Tengo una infinidad de cosas que anteriormente no fueron logradas y que yo he realizado, y que han dejado satisfechas a la gente de Ovalle».
¿Nada que hacer otro candidato entonces, debido al gran apoyo que tiene en la comuna?
«Eso se verá en las urnas mi amigo, pues no tengo que ser soberbio ni mucho menos. Pero cuando me preguntas si iba por un tercer periodo, le respondí que sí, ¿para qué te voy a decir que no o que no es el momento? Si acá hay que sincerarse alguna vez, y estoy convencido de eso. Ahora tendré que utilizar estrategias para que la gente me pueda reelegir nuevamente. Pero de verdad que me siento muy a gusto con el trabajo que estoy realizando, muy comprometido con la comunidad. No voy a defraudarlos tampoco, entonces creo que estamos por el camino correcto. ¿Algún rival? No le demos triguito a los pollitos…».
Parece que siente demasiada confianza en su trabajo…
«Es que lo único que hago es trabajar. Y en ese sentido hemos complacido las necesidades de moros y cristianos, porque esta es una alcaldía inclusiva, que incorpora a todos los actores sociales para desarrollar un trabajo mancomunado y en beneficio primeramente en los temas educacionales; segundamente en temas de salud, y tercero, apoyar la gestión de cada uno de nuestros adultos mayores, porque ellos van a tener un recinto en donde van a poder albergarse. Esto, porque el Gobierno de nuestro Presidente Sebastián Piñera ha otorgado un comodato a la municipalidad y el edificio antiguo del hospital será para los adultos mayores».
¿Le han dolido las críticas, principalmente cuando hablan de una desastrosa administración municipal?
«Ninguna, porque no leo las críticas. Soy un convencido de que la labor que estoy realizando la estoy desarrollando bien con mis funcionarios municipales. Y en ese sentido hemos demostrado el trabajo entre todos, ¿le parece, o no? Si esta cuestión de la vida uno tiene que tomarla así. Que el mandato de mi pueblo y el mandato de Dios pueda ayudar a la ciudadanía ovallina entera, sin excepción, sin sectarismo, sin miramiento de nadie, porque lo que queremos es tener una hermosa ciudad, una comuna que nace en Amolana y llega por el oriente hasta la cortina de Paloma y después sigue por Aguas Buenas…».
Independiente por siempre
Fue en las primeras elecciones cuando el hoy jefe comunal fue electo como militante de Renovación Nacional. Pero de aquella militancia ya no queda nada, «solamente agradecimiento por el apoyo», porque ahora dice que es un independiente hasta la muerte y que nada ni nadie le hará cambiar de opinión.
«No niego que estuve inscrito en Renovación Nacional. En ese momento no estaban las condiciones y que ahora hayan mejorado ese es problema de cada uno de los partidos, pero yo como candidato a alcalde de la comuna de Ovalle voy de manera independiente. Eso está sacramentado, porque siento el apoyo de toda la ciudadanía, de todos los sectores, y voy a ser sincero: si ellos me apoyaron en una oportunidad, yo se los agradezco y a todos sin excepción. Así que a quienes me apoyen les agradezco la voluntad, pero yo, mientras sea Claudio Rentería, una persona natural, seré independiente. Una vez estuve participando y con mi estilo de vida y trabajo, caí mal (ríe). Pero eso es parte de la historia y dejémosla ahí nomás».
Si no irá por un cuarto periodo, ¿entonces qué hará después?
«¿Sabe lo que voy a hacer cuando termine mi tercer periodo? Irme a mí casa, eso haré. Posteriormente me sentaré en la Plaza de Armas a ver cómo quedan mis muchachitos que pasean por ahí y seré un ferviente fiscalizador der las acciones de mis funcionarios eficientes que voy a dejar en la municipalidad, porque esto tiene que replicarse en el transcurso del tiempo, que tengamos un sello para la comunidad».
¿Le ha traído problemas ser un alcalde atípico?
«No, ¿por qué poh? Uno tiene que tener la capacidad para escuchar a la gente, ser tolerante y ayudar al prójimo. Acá las puertas de la municipalidad están abiertas para todos, sin excepción. He sido respetuoso con cada uno de ellos (políticos), porque no todos los dedos de las manos son iguales, aunque funcionan de la misma manera».