Un helicóptero y una súper lancha de la Armada acudieron al llamado de auxilio, después que la embarcación se hundiera a 20 millas al oeste de la bahía de Tongoy.

En las costas porteñas se realizó este lunes un operativo de rescate casi de ciencia ficción, luego que la gobernación marítima rescatara a tres tripulantes de un yate que finalmente se hundió a 2 mil metros de profundidad, cercano a 25 millas al hueste (oeste) de la bahía de Tongoy.

Para aquello se utilizaron un helicóptero y una lancha, además de varios profesionales en acción. Todo eso para salvarlos.

En diálogo con Diario La Región, el comandante Ricardo Alcaíno, gobernador marítimo de Coquimbo, contó que a eso de las 8.45 horas de la mañana de este lunes recibieron un llamado de emergencia desde un yate que se estaba desplazando desde La Herradura hasta Algarrobo, en la región de Valparaíso, el que dio señales de auxilio después de encontrarse con fallas de máquinas y con vías de agua.

«De forma inmediata se activaron todos los protocolos de emergencia, desplegando nuestra unidad marítima y el helicóptero naval al lugar, aproximadamente a 20 millas al hueste (oeste) de la bahía de Tongoy. Y cerca a las 10:30 horas, cuando llegaron los medios al lugar, procedieron al rescate de los tres tripulantes, pues efectivamente el yate estaba en proceso de hundimiento».

Mezcla de cosas

Destaca Alcaíno que «gracias al pronto actuar y profesionalismo de las dotaciones», se logró rescatar a estas tres personas y de manera ilesa, no así la embarcación, que debido a los desperfectos que presentaba, terminó por hundirse.

Posteriormente, las personas llegaron al puerto de Coquimbo, todos en buen estado de salud, y hasta el cierre de esta edición se continuaba recabando los antecedentes, «producto que se va a sustanciar una investigación, un sumario administrativo marítimo para esclarecer los hechos», agrega.

Debido a su experiencia en este tipo de situaciones, aclara Alcaíno que hubo una mezcla de situaciones para que todo saliera perfecto, «porque efectivamente el oportuno aviso de una emergencia, sumado al rápido despliegue de nuestros medios, permitió salvar estas tres vidas».

Al lugar, luego del aviso de emergencia, llegaron con los dos medios, tanto el helicóptero como con la patrullera de la armada LSG Coquimbo, «y finalmente fue esta, con su bote de goma, quien materializó el rescate, mientras el helicóptero se mantenía en una condición de resguardo ante una posible situación que involucrara activar a los ganadores de rescate».

Se supone que el accidente lo produjo una falla mecánica que involucró una avería de agua, «pero eso es parte de la investigación sumaria que se está sustanciando para esclarecer los hechos».

Justamente en el sector de la Bahía de Tongoy, cercano a Punta Lengua Vaca, siempre las condiciones no son muy favorables, «pero, sin embargo, está navegable para efectos prácticos marítimos», afirma.

En cuanto a los rescates, esgrime que el año pasado tuvieron varios similares, «aunque el principal fue una embarcación que estaba cerca de 200 millas al hueste, en alta mar, bajo muy malas condiciones meteorológicas. Son rescates que en forma habitual se están dando, pero hasta el momento, y gracias al rápido actuar de la armada, hemos podido salvar a todas las personas involucradas en estas situaciones».

Los tres tripulantes son todos mayores de edad, de nacionalidad chilena, y junto al yate habían participado estos días en el Circuito Norte de veleros oceánicos, que después de catorce años regresó a aguas de la región de Coquimbo, y ayer habían zarpado desde La Herradura hasta Algarrobo, su club de yate de origen.

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