La Iglesia Corazón de Maria, de Ovalle, fue uno de los monumentos afectados por el terremoto del pasado 16 de septiembre.
Esta construcción ubicada en el centro de la ciudad tiene más de 100 años. Resultó muy afectada tras el fuerte movimiento sísmico. Su cúpula debió ser sacada, ya que era un peligro para la comunidad, en especial para los residentes cercanos al lugar.
En estos días el municipio, a través del departamento de Aseo y Ornato y la Oficina de Prevención de Riesgos, limpia el interior del templo, donde hay escombros del estuco de murallas y maderas de los cielos.
Cuadrillas municipales trabajan con medidas de seguridad extremas dado el grave deterioro que tiene la iglesia. Los escombros son llevados al vertedero municipal.
El alcalde Claudio Rentería indicó que desde «el primer día estamos preocupados del estado de las iglesias, sobre todo del Corazón de María, que es uno de los patrimonios que tenemos en la comuna».
Por su parte, el encargado de la Oficina de Prevención de Riesgos, Wilson Araya, indicó que «estamos haciendo este operativo de limpieza y, obviamente, estamos tomando todas las medidas de seguridad, ya que el templo sufrió múltiples daños y tiene riesgo de derrumbe en algunos sectores, si es que se produce un movimiento telúrico de alta intensidad».
La gestión se realizó para evitar la propagación de vectores infecciosos producto de la humedad y la acumulación de fecas de paloma.
