Se inició el proceso formal de la propaganda electoral de los candidatos a las municipales 2012 y con ello una serie de acciones que se desarrollan, como las actividades de publicidad callejera y en los medios de comunicación radial, donde en los tradicionales jingles se suele utilizar canciones conocidas o se apela al humor.
En este contexto el Seremi de Gobierno Iván Espinoza reiteró un llamado a los candidatos a mantener este proceso dentro de las normas de respeto y educación, donde se privilegie la entrega al elector de las ideas y propuestas que sustentan cada campaña, por sobre el uso de la ridiculización y la mofa, especialmente en la propaganda radial
«En esta situación se debe aplicar el criterio, respetamos la creatividad y la libertad de opinión que existe en nuestro país, pero aquello no significa que los candidatos se aprovechen para atacar o ridiculizar a sus contrincantes o a las autoridades».
La autoridad señaló que «esperamos que se mantengan estas normas mínimas de buena convivencia democrática, porque es evidente que al electorado finalmente le interesa saber cómo sus problemas serán abordados por quienes pretenden asumir la responsabilidad de transformarse en sus autoridades comunales y en ese escenario, evitar las agresiones, ataques y otras acciones que se alejan del espíritu que poseen las elecciones municipales, es la mejor muestra de la calidad personal y cívica de los candidatos».
Espinoza reiteró el llamado a los candidatos a que también se preocupen de sus campañistas y tomen responsablemente las medidas de seguridad necesarias, para evitar acciones de tanto riesgo como ocupar el tendido eléctrico para instalar la publicidad, algo que además de ser extremadamente peligroso, está prohibido según la normativa.
«Los candidatos son responsables de que sus equipos de trabajo efectivamente respeten las normas establecidas en lo referente a propaganda política y por supuesto preocuparse de la seguridad y el comportamiento de quienes les ayudan en estas tareas. Siempre las mejores campañas son de ideas y no de agresiones entre comandos o ataques injustificados. Estas situaciones son el mejor ejemplo, de cómo un candidato asume plenamente su responsabilidad para llegar al cargo que postula y no sólo quedarse en las palabras».
