Tal como se había pronosticado, el día jueves las temperaturas máximas en varias localidades del Valle de Elqui, sobrepasaron los 34ºC a la sombra. Según la estación meteorológica del CEAZA, en la ciudad de Vicuña se contabilizaron 34,77ºC a las 14:00 horas; en Rivadavia, se registraron 34,03ºC a las 15:00 horas; y en Pisco Elqui se registraron 34,41ºC a las 14:00 horas.
Algunos termómetros de particulares en el centro de Vicuña marcaron 35,6ºC y 35,9ºC a la sombra, alrededor de las 14:30 horas. En el sector de Chañar Blanco, cerca de la localidad de Paihuano, se contabilizaron 40ºC a la sombra en un predio agrícola; según lo informado en las redes sociales.
De igual forma ayer viernes las temperaturas máximas fueron bastante altas en los principales sectores del valle: 34,67ºC a las 14:00 horas en Vicuña; 34,45ºC a la misma hora en Pisco Elqui; y 34,16ºC a las 15:00 horas en Rivadavia.
Ante esta ola de calor las autoridades de salud pública reiteraron el llamado a tomar todas las medidas necesarias para soportar de mejor forma esta ola de calor que se prolongará hasta al menos el lunes 28 de diciembre. Al respecto el director del Hospital de Vicuña, doctor Moritz Reimberg Fuentes, indicó: «Se recomienda ingerir bastante agua, no bebidas gaseosas; no exponerse directamente al sol en horas peak de calor, no realizar ejercicios en esas horas, sino en horarios más frescos; usar ropa liviana y aplicar bloqueador solar sobre la piel expuesta a la radiación solar. En caso de los hipertensos se recomienda no consumir comidas con mucha sal y tomar en forma estricta los medicamentos recomendados por el médico. Es importante tomar mucha agua en forma permanente porque a veces la deshidratación no se nota y si ocurre puede ocurrir una descompensación en la persona hipertensa».
Consultados varios vecinos de la capital elquina, indicaron que nunca antes habían experimentado tantos días de calor en el mes de diciembre ni con temperaturas máximas sobre los 34ºC. «Todos sufrimos con estos calores, no sólo las personas que sufren alguna enfermedad, sino también quienes trabajan en terreno o bajo techo porque el calor lo inunda todo. Incluso en las noches el calor sigue dentro de las casas y no se puede dormir porque el calor parecer quedar atrapado en las paredes y los techos», expresó Jacqueline R. Otra vecina, identificada como Ana Rosa, sostuvo que la radiación solar era tan intensa que apenas se soportaba, sobre todo en las calles: «Uno sale a comprar algo rápido y llega a la casa con la ropa casi ardiendo y la piel que llega a picar. Las plantas para qué decir, quedan todas marchitas con el intenso calor», precisó.
