Ceferino del Rosario Muñoz Cuevas, de 42 años de edad, falleció en la madrugada del domingo en un calabozo de la Sexta Comisaría de Las Compañías.
El informe de la autopsia, firmado por la doctora Katia Cabrera, indica Traumatismo toraco- abdominal.
Sin embargo las heridas podría habérselas ocasionado al chocar cuando guiaba su Suzuki Baleno en el sector alto de Islón camino a Coquimbito, y chocó de frente con un Mazda 323 que corría en sentido contrario.
Esto fue el sábado en la noche, entre las 21 y las 22:30 horas. Transcurridas algunas horas, ambos conductores fueron llevados a constatar lesiones. A Muñoz Cuevas, lo habría atendido un médico de apellido Jaramillo. Su informe fue de heridas leves, razón por la que Carabineros lo regresó al calabozo. Ambos habrían estado bajo influencia del alcohol.
Es el caso, relatan familiares, que a ellos en ningún momento se les dio cuenta del accidente, sino hasta las 07 horas del día siguiente cuando los reunieron en la comisaría para notificarlos de la muerte y les entregaron unas ropas del familiar, ropas que horas después le fueron pedidas «por orden del fiscal».
Cristian Muñoz, el mayor de los hermanos, dice que están llenos de dudas e interrogantes. Desde luego, por qué no les avisaron. Su padre andaba con celular. De hecho, de ahí les avisaron al día siguiente. No entienden cómo carabineros no se percataron del grave estado en que estaba el herido, el que, según otros testigos, pedía agua y ayuda. «Se retorcía con las manos en el estómago, le dolía, pedía ayuda, que se la negaron»…
Por otro lado, dice, en lugar del accidente hubo un linchamiento, Apedrearon el auto de su madre y «seguramente hasta lo han golpeado»… «Pero Carabineros no detuvo a nadie y el auto desapareció. Según Carabineros se incendió sin dejar huella alguna. Extraño, por decir lo menos».
La familia, que vive el en sector El Rosario, espera respuestas.
Hoy a las 15 horas son los funerales del trabajador que deja a una viuda y tres hijos.
