La emergencia se habría iniciado pasadas las 7 de la mañana en una vivienda ocupada para el arriendo de piezas a ciudadanos haitianos, ubicada en la intersección de las calles Sotomayor con Valdivia en el sector de Tierras Blancas, comuna de Coquimbo. Siniestro que de pasó destruyó la totalidad de la casa vecina pero que no dejó víctimas fatales. Bomberos indaga las razones del lamentable suceso que dejó a una decena de personas con lo puesto. Hace un mes, un incendio similar le costó la vida a una persona.
cerca de una hora con el objetivo de combatir las llamas, que en un principio amenazaron con propagarse a viviendas aledañas.
El fuego era significativo, con llamas que alcanzaron grandes dimensiones. Producto de la propagación, ambas casas fueron consumidas a la altura del kilómetro 570 del popular barrio de Tierras Blancas, afortunadamente a esa hora de la mañana no había personas al interior de las viviendas afectadas
HAITIANOS
Fuentes de la región señalaron que la dueña de casa utilizaba la construcción de tres pisos para arrendarla a una serie de familias haitianas que se dedican a diferentes rubros tanto en el puerto como en La Serena.
Hace unos tres años había levantado la edificación. Hasta el cierre de esta edición, ni bomberos ni Carabineros informaban sobre las causas que pudo haber provocado el incendio, cuestión que debería ser indagada en los próximos días.
INCENDIO ANTERIOR
La situación es de extrema emergencia en la zona. Había sido el pasado 3 de noviembre cuando un accidente muy similar ocurrió en el mismo sector de Tierras Blancas. En aquella oportunidad hubo un fallecido que lamentar.
La víctima, identificada como Carlos Alberto Cortés Araya, habría sido la única persona que se encontraba al interior de un inmueble ubicado en la calle Maule con Pedro Aguirre Cerda, del mismo sector de Tierras Blancas.
Según información entregada por bomberos a este medio, antes de las 7 de la mañana de ese jueves comenzaron a emanar llamas desde el primer piso de la casa. Vivienda que el afectado ocupaba para arrendar piezas a extranjeros.
Los vecinos, en conversación con este medio, desnudaron aquella problemática que se repetiría no solo en el caso anteriormente expuesto, sino que por una serie de otras construcciones que se ven desde el exterior, no cumplirían con la debida reglamentación, sirviendo como negocio perfecto en el arriendo a trabajadores inmigrantes, que pagan precios menores a los $100 mil pesos mensuales por tener un espacio bajo techo.
Situación que se complejiza pues muchos prefieren vivir hacinados con tal de ahorrar dinero, meten en un dormitorio a mucha gente.
«Felicitar por su labor incondicional a los bomberos, el único problema fue el agua, ya que no hay grifos. Mi pregunta es a qué entidad debemos informar sobre la situación de los grifos», decía una vecina, reclamando los problemas en la jornada del miércoles